Este proyecto es 'ampliable' en función de otros operadores y del desarrollo del mercado
Orange invertirá unos 300 millones de euros en los próximos cuatro años dentro de su plan para el despliegue en España de una red de nueva generación de fibra óptica para el hogar (FTTH) que permitirá ofrecer a los clientes velocidades de 100 megas y superiores, según ha informado este viernes el consejero delegado de Orange, Jean Marc Vignolles.
En concreto, esta inversión permitirá a Orange llevar su red de fibra óptica a unos 1,5 millones de hogares y negocios ubicados en las principales ciudades españolas. Actualmente, Orange dispone de proyecto pilotos de fibra en Madrid y Barcelona bien mediante despliegue de red propia o con la utilización de redes neutras privadas como la de Ufinet (Unión Fenosa) y públicas como la de Asturcon, en Asturias, y la red del Ayuntamiento de Viladecans.
De acuerdo con el plan, los primeros hogares conectados estarán disponibles a partir del cuarto trimestre de este año, aunque no serán todavía unos volúmenes significativos con respecto al total para los cuatro años, según ha precisado la compañía.
'A pesar de las múltiples incertidumbres actuales, entre otras el marco regulatorio, queremos dar este paso como un ejemplo de nuestro compromiso en España', ha indicado el directivo, quien ha señalado que este proyecto es una 'invitación' para el resto de los operadores con el fin de incentivar planes conjuntos.
No obstante, el director de la unidad de negocio fijo de Orange, Samuel Muñoz, ha aclarado que esta cifra de inversión descuenta un acuerdo con Telefónica, que está 'muy avanzado', para la compartición de líneas verticales, así como la mejora de la operativa de la oferta mayorista de conductos (MARCO).
CAMBIOS REGULATORIOS
Muñoz ha reconocido que si no se produjeran estos dos condicionantes y se tuviera que llevar a cabo obra civil en todos los lugares, el proyecto sería 'inviable'. No obstante, el directivo ha indicado que los acuerdos técnicos con el incumbente están avanzados y que quedan pendiente los acuerdos económicos, que espera que se cierren 'sin problemas' y sin necesidad de arbitraje por parte de la CMT.
En cuanto a la mejora de acceso a ductos, Muñoz ha señalado que la nueva oferta será 'inminente' y espera que se cumplan los requisitos necesarios para el desarrollo de sus planes de inversión. Por último, el directivo ha mencionado la necesaria colaboración de las administraciones públicas (AAPP) para facilitar y acelerar los trámites.
ABIERTO A OTROS OPERADORES
Vignolles ha resaltado que el proyecto de Orange está abierto a la participación de otros operadores y del desarrollo del mercado y
ha aclarado que el éxito de estas iniciativas depende en gran medida del impulso de un marco regulatorio que incentive las inversiones privadas. 'Me consta que la CMT está trabajando en esto', ha añadido Vignolles.
'Nuestro sector contribuirá a la salida de la crisis y con la fibra podremos contribuir a la creación de empleo, a la productividad de las empresas y entidades públicas. Para ello necesitamos la colaboración del regulador, administraciones y otras empresas', ha añadido el consejero delegado de Orange.
En concreto, esta inversión permitirá a Orange llevar su red de fibra óptica a unos 1,5 millones de hogares y negocios ubicados en las principales ciudades españolas. Actualmente, Orange dispone de proyecto pilotos de fibra en Madrid y Barcelona bien mediante despliegue de red propia o con la utilización de redes neutras privadas como la de Ufinet (Unión Fenosa) y públicas como la de Asturcon, en Asturias, y la red del Ayuntamiento de Viladecans.
De acuerdo con el plan, los primeros hogares conectados estarán disponibles a partir del cuarto trimestre de este año, aunque no serán todavía unos volúmenes significativos con respecto al total para los cuatro años, según ha precisado la compañía.
'A pesar de las múltiples incertidumbres actuales, entre otras el marco regulatorio, queremos dar este paso como un ejemplo de nuestro compromiso en España', ha indicado el directivo, quien ha señalado que este proyecto es una 'invitación' para el resto de los operadores con el fin de incentivar planes conjuntos.
No obstante, el director de la unidad de negocio fijo de Orange, Samuel Muñoz, ha aclarado que esta cifra de inversión descuenta un acuerdo con Telefónica, que está 'muy avanzado', para la compartición de líneas verticales, así como la mejora de la operativa de la oferta mayorista de conductos (MARCO).
CAMBIOS REGULATORIOS
Muñoz ha reconocido que si no se produjeran estos dos condicionantes y se tuviera que llevar a cabo obra civil en todos los lugares, el proyecto sería 'inviable'. No obstante, el directivo ha indicado que los acuerdos técnicos con el incumbente están avanzados y que quedan pendiente los acuerdos económicos, que espera que se cierren 'sin problemas' y sin necesidad de arbitraje por parte de la CMT.
En cuanto a la mejora de acceso a ductos, Muñoz ha señalado que la nueva oferta será 'inminente' y espera que se cumplan los requisitos necesarios para el desarrollo de sus planes de inversión. Por último, el directivo ha mencionado la necesaria colaboración de las administraciones públicas (AAPP) para facilitar y acelerar los trámites.
ABIERTO A OTROS OPERADORES
Vignolles ha resaltado que el proyecto de Orange está abierto a la participación de otros operadores y del desarrollo del mercado y
ha aclarado que el éxito de estas iniciativas depende en gran medida del impulso de un marco regulatorio que incentive las inversiones privadas. 'Me consta que la CMT está trabajando en esto', ha añadido Vignolles.
'Nuestro sector contribuirá a la salida de la crisis y con la fibra podremos contribuir a la creación de empleo, a la productividad de las empresas y entidades públicas. Para ello necesitamos la colaboración del regulador, administraciones y otras empresas', ha añadido el consejero delegado de Orange.
