Informar sobre la sumisión química -la administración de sustancias químicas a una persona sin que ésta sea consciente con la finalidad de anular su resistencia- advertir de que forzar una relación sexual supone un delito y dejar claro que, sin un consentimiento expreso, el cuerpo de una persona no se toca, han sido los objetivos de la UPAS -Unidade de Prevención de Agresións Sexuais o "Punto violeta"- cuyas voluntarias, desde el pasado viernes y hasta el lunes de Entroido, han prestado servicio en Xinzo de Limia y han repartido, cada día, más de 1.500 vasos reciclables y folletos informativos para prevenir las agresiones sexuales.
El Concello de Xinzo, en colaboración con la organización Enclave feminista -que ha estado en contacto con las fuerzas y cuerpos de seguridad, con la Axega y con varios establecimientos colaboradores- han desarrollado, además, un plan de prevención y actuación ante posibles conductas delictivas de índole sexual durante el Entroido limiano.
Ángeles Álvarez, responsable del puesto, manifestaba este lunes que no se había comunicado, hasta el momento, ningún caso de agresión sexual en el punto y que, por el contrario, los jóvenes habían sido "muy" receptivos. "La campaña está enfocada a un tipo de violación muy específica que es la sumisión química", explicó Ángeles Álvarez. "El principal mensaje que estamos colocando tiene que ver, por supuesto, con no tolerar las agresiones y con que tu cuerpo no se puede tocar sin permiso, pero hay un peligro importante con que en la bebida se suministre alguna sustancia que te haga perder la consciencia. Es importante mantenerla controlada en todo momento", añadió.
Por otro lado, desde la UPAS matizaron que, cuando alguien se aprovecha de la merma en la capacidad volitiva de una persona que, por voluntad propia, ha bebido en exceso, también está cometiendo un abuso. "Las relaciones sexuales se tienen que producir previo consentimiento y con la consciencia plena por parte de la otra persona", remarcó la integrante de la UPAS. "Lo que le estamos diciendo a las chicas es que si de pronto tienen consciencia de que hay un lapsus de tiempo con un vacío en su memoria, acudan a un centro sanitario para ser sometidas a una prueba. Si, por contra, se registrara algún caso de agresión sexual llamaríamos a la policía y las acompañaríamos. Es importante la cuestión de la no higienización para mantener las pruebas de cara una investigación posterior", añade.
