Radiantes como el sol que ayer brilló en prácticamente toda la provincia. Así se veían las bonitas a las puertas de la iglesia de San Salvador de Sande (concello de Cartelle), donde hacían su aparición por primera vez en la parroquia después de un año de espera.
Muchas caras nuevas, pero sobre todo los de siempre, se dejaron caer por la parte antigua del pueblo donde el colorido y la elegancia de esta máscara caracterizada a base de plumas y mantones, chocaba con la piedra y el verde que, en forma de maleza, ha ido dando forma a esta idílica parroquia del rural celanovés.
La visita fue recibida con emoción y alegría por parte de los más mayores, alguno de los cuales aún recordaba los orígenes y anécdotas de un traje que tiene mucho que ver con la emigración y la guerra de Filipinas.
Los festejos se retomarán el martes. A la hora del vermú está previsto que hagan su aparición las bonitas y avutardas que, desde A Xesteira, iniciarán un pasacalles que les llevará a recorrer las distintas calles y caminos de Sande, amenizados por la charanga Sorcha. La vaca y el oso salvaje, que en la tarde del sábado hizo las delicias de los asistentes en una caza simulada por las bodegas de Mogos, también están invitados a participar en el recorrido, así como en la posterior comida popular que se desarrollará en el local social a base de jamón asado, chorizos, callos, pan, postre y bebida (previa inscripción).
