La aeronave siniestrada, un Airbus A320, despegó de la terminal T-2 del aeropuerto del Prat de Barcelona poco antes de las diez de la mañana
Cuarenta y cinco personas con apellido español viajaban en el avión de la compañía Germanwings que se ha estrellado esta mañana, con 144 pasajeros y 6 tripulantes, en los Alpes franceses tras partir de Barcelona en dirección a Dusseldorf (Alemania).
La aeronave siniestrada, un Airbus A320, despegó de la terminal T-2 del aeropuerto del Prat de Barcelona poco antes de las diez de la mañana -con media hora de retraso- y, según el presidente francés, François Hollande, todo apunta a que no hay supervivientes.
Efectivos de la gendarmería francesa han logrado acceder a la zona montañosa donde ha caído el Airbus, que ya fue escenario de otra tragedia aérea en 1953, y han podido recuperar una de las cajas negras, que será analizada para tratar de aclarar las causas del siniestro.
La mayoría de los 144 pasajeros que viajaban en el vuelo de Germanwings -compañía de bajo coste de Lufthansa- que se ha estrellado en los Alpes Haute Provence, cerca de la localidad de Barcelonette, son alemanes que regresaban a sus casas tras pasar unos días en Barcelona y Palma de Mallorca.
Fuentes de la aerolínea calculan que en el aparato viajaban al menos 67 ciudadanos alemanes, mientras que la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha confirmado que entre los pasajeros "hay 45 apellidos españoles".
A lo largo de la tarde se han ido conociendo algunos detalles de algunos ocupantes de la aeronave, aunque todavía no se dispone del listado de identidades.
El ayuntamiento de Llinars del Vallèès ha confirmado que 16 alumnos alemanes de cuarto de ESO y dos profesoras que habían realizado un intercambio escolar en un instituto de esta localidad barcelonesa iban en el avión.
También se ha confirmado que viajaba una mujer de Jaca (Huesca) y su bebé de 7 meses, Josep Sabaté Casellas, un exempleado de la firma gallega Inditex que esperaba el nacimiento inminente de cuarto hijo; dos trabajadores de Fira de Barcelona, otros tantos de la multinacional Delphi; al menos un trabajador de Bayer y la esposa de otro empleado de la multinacional química.
La mujer del jefe de gabinete del líder de ERC, Oriol Junqueras, y una docente de Valencia -que iba a visitar a uno de sus hijos que estudia en Alemania- figuran también entre los pasajeros.
Varios trabajadores de la empresa NutriSport, que elabora bebidas y alimentos para deportistas y está ubicada en la localidad barcelonesa de Argentona; dos empleados de Desigual -un hombre y una mujer que buscaban ubicaciones para futuras tiendas en Alemania- iban asimismo en este vuelo.
Entre el pasaje se sabe que estaban un transportista de Lorca, ya que su familia habló con él justo antes del despegue, un vecino de Águilas, ambas localidades murcianas, y una joven de Soria.
El Gobierno ha decretado tres días de luto oficial, que comenzarán esta medianoche, según ha anunciado la vicepresidenta tras presidir en el Palacio de la Moncloa la reunión del gabinete de crisis puesto en marcha para analizar los datos sobre el siniestro.
