Los guardias civiles Fernando Trapero y Raúl Centeno reciben la medalla de oro de Madrid a título póstumo

Esperanza Aguire hace entrega de la medalla de oro.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, entregó hoy la Medalla de Oro al mérito Ciudadano de la Comunidad de Madrid a los familiares de los guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero asesinados por ETA en Francia el 1 de diciembre de 2007 en la localidad francesa de Capbreton y aseguró que todos los españoles han de hacerse merecedores del 'sacrificio de ambos para lograr el objetivo por el que han dado sus vidas: acabar con ETA de una vez por todas, con todo el peso de la Ley'.
En un acto celebrado en la Real Casa de Correos, sede de la Comunidad de Madrid, la presidenta regional afirmó que Trapero y Centeno, dos 'héroes jóvenes y valientes de Madrid, dejan a los españoles una lección que no deben olvidar. 'Si ellos eligieron aquel destino para perseguir a los etarras y prevenir sus atentados criminales es porque sabían que a ETA había que vencerla con la fuerza de la Ley y porque creían que el Estado de Derecho acabará derrotando a este puñado de asesinos totalitarios', dijo.

Además se preguntó de qué madera estaban hechos ambos miembros de la Benemérita para elegir a sus 23 y 24 años 'el punto más arriesgado de la lucha antiterrorista'. ¿En qué creían esos dos jóvenes para ocupar esos de puestos de vanguardia en defensa de nuestras libertades?, ¿qué compromiso tenían con nosotros esos dos jóvenes para jugarse la vida en Francia y prevenirnos de atentados que hubieran costado muchísima vidas?', añadió.

Aguirre destacó que, por razones como éstas, la Comunidad de Madrid concede a Centeno y a Trapero la Medalla de Oro al Mérito ciudadano, 'una distinción que ellos honran desde hoy y para siempre con sus nombres'. 'Con estas distinciones hemos querido expresar el reconocimiento de los madrileños a los guardias civiles y a sus familias por habernos demostrado que el honor, el deber, el sacrificio y el patriotismo siguen vivos entre nosotros', concluyó.

ACTUACIONES CONTRA EL TERRORISMO


Al acto también asistió el director general de la Guardia Civil y de la Policía, Joan Mesquida, que aseguró que los dos guardias civiles asesinados son un ejemplo de dignidad y grandeza para todos los españoles y afirmó que 'se están realizando investigaciones que concluirán en actuaciones policiales contra el terrorismo' y que los dos agentes asesinados ambos 'están allí'.

Mesquida aseveró que la muerte de Trapero y Centeno ha resultado ser uno de los momentos 'más amargos' de su vida desde que asumió el cargo y señaló que 'siempre recordará' aquella mañana de sábado 'fría, gris y lluviosa' en el sur de Francia. 'Era como si la Naturaleza hubiera querido sumarse al dolor irreparable que todos sentíamos', añadió.

'NI LA ALIMAÑAS COMETEN HECHOS DE TAL BARBARIE'


Según manifestó, en aquellos momentos no fue capaz de encontrar una explicación para un suceso 'tan vil y cobarde' porque 'ni las alimañas son capaces de cometer hechos de tanta barbarie'. Por ello, advirtió de que el compromiso de la sociedad ahora es hacer todo lo posible para los asesinos de los dos guardias civiles 'rindan cuentas ante los tribunales'.

'Sus familias recogen hoy unas medallas que sus hijos no lucirán en sus uniformes', mantuvo Mesquida, quien añadió que Trapero y Centeno 'no dudaron en entregar sus vidas en el cumplimiento de su deber' por lo que seguirán vivos en el corazón de la Guardia Civil y en la memoria de España y de los españoles.

El director general de Policía y la Guardia Civil apuntó que es necesario que los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado continúen y terminen la obra iniciada por los dos guardias civiles asesinados y subrayó que el Estado de Derecho 'va a derrotar a los terroristas porque no se puede permitir que su terror, su fanatismo y su odio debiliten a España'.

El acto, al que asistieron el consejero de Presidencia e Interior, Francisco Granados, la presidenta de la Asamblea de Madrid, Elvira Rodríguez; el secretario general del PP, Ángel Acebes, y diversos diputados regionales, entre otros, comprendió la lectura de los acuerdos del Consejo de Gobierno y méritos de los homenajeados, así como la ofrenda de una corona de laurel en honor a los fallecidos y la intervención de la Banda de Música de la Guardia Civil, que interpretó 'La muerte no es el final'.

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