Dos personas están hospitalizadas heridas graves tras las protestas registradas ayer contra la sentencia del procés, sobre todo en el aeropuerto de El Prat y que con menor intensidad han proseguido este martes con cortes en carreteras y líneas de ferrocarril, y que ahora se focalizan ante las delegaciones del Gobierno en las capitales catalanas.
Un lesionado en un ojo, al que le ha estallado el globo ocular, y un hombre que ha tenido que ser operado en el Hospital Clínic de Barcelona por traumatismo testicular, son los heridos graves de los 131 registrados por el Sistema de Emergencias Médicas (dependiente de la Generalitat) tras las cargas policiales.
El aeropuerto del Prat, que ayer fue epicentro de las protestas, ha amanecido con relativa normalidad, exceptuando los centenares de viajeros que han preferido pasar la noche en las terminales para no arriesgarse a perder sus vuelos ante nuevas protestas, después de que ayer se cancelaran un centenar y este martes otros 45.
Según el Ministerio de Fomento, hay normalidad en todos los aeropuertos y tampoco ha habido incidencias reseñables en los puertos de Barcelona y Tarragona, donde se ha producido una breve ocupación de las vías ferroviarias de 20 minutos por parte de un grupo de manifestantes.
Esta tarde, los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR) han convocado nuevas protestas en Barcelona, Tarragona, Lleida y Girona ante las sedes de las delegaciones del Gobierno.
En Barcelona, centenares de personas se dirigen al centro de la ciudad desde la Gran Vía, una movilización que se ha iniciado sobre las 15.00 de esta tarde en la Avenida del Paral.el en sentido plaza España, y que está provocando desvíos del tráfico, según informa la guardia urbana.
A lo largo de la segunda jornada de protestas por la sentencia del `procés`, se han registrando también cortes intermitentes de carreteras en toda Cataluña desde primera hora de la mañana, como la AP-7, la C-25, la C-17 o la N-260.
En algunos puntos, como la C-65, a su paso por Cassà de la Selva (Girona), los Mossos han cargado contra los manifestantes para desalojar la calzada.
Según el Servicio Catalán de Tráfico, antes de las 19:00 horas había retenciones de 10 kilómetros en la N-II en Girona, así como colas de unos 3 kilómetros tanto en Fornells de la Selva (Girona) -en sentido Girona- como en Girona en AP-7, en sentido sur.
A las 18:45 horas continúan cortadas al tráfico por manifestación la N-340, en Vilafranca del Penedès; la A-26, en Sant Joan les Fonts, sentido Figueres, la C-25 y la C-17, en Gurb, y la N-II, en Mataró.
También se han producido cortes en varias líneas del tren en Tarragona y Girona, donde a media mañana se ha podido restablecer el servicio de la línea del AVE entre Barcelona y Figueres, que ayer permaneció interrumpido debido a los desperfectos provocados en las vías por los manifestantes.
Según el Ministerio de Fomento, está suspendida la circulación entre Reus y Tarragona y entre Reus y Constantí, debido a un grupo de personas que invaden las vías en el kilómetro 580+410, lo que afecta a los servicios de las líneas RT1, R14 y R15 de Cercanías.
Las protestas de ayer se desarrollaron de forma pacífica hasta que a última hora de la tarde grupos de manifestantes lanzaron objetos contra agentes de los Mossos d`Esquadra y la Policía Nacional, que realizaron cargas para desalojarles del edificio aeroportuario y utilizaron proyectiles de precisión de `foam` (espuma) y pelotas de goma.
La Policía Nacional ha admitido que disparó 14 pelotas de goma en las actuaciones policiales de última hora de ayer, mientras que los Mossos d`Esquadra, que tienen prohibido por el Parlament usar ese material antidisturbios, emplearon proyectiles de precisión para dispersar a los manifestantes.
El Departamento de Interior, además, ha abierto una investigación por la actuación de unos antidisturbios de los Mossos que arrancaron el furgón con una manifestante subida a la parte delantera, según un informe interno de la consellería, que justifica que la policía catalana tuvo que cargar contra los concentrados en el aeropuerto para evitar "riesgos para la seguridad", tras más de tres horas de "mediación y contención".
De hecho, la consellera de la Presidencia, Meritxell Budó, ha justificado las cargas "puntuales" de los Mossos en El Prat con el fin de "proteger a los propios manifestantes".
