Una reportera gráfica ha sido trasladada a las dependencias de la Comandancia de la Guardia Civil cuando llevaba a varios inmigrantes en su vehículo.
Un inmigrante de origen subsahariano ha resultado herido en el salto protagonizado por más de medio centenar de personas de origen subsahariano por la zona próxima a la frontera de Farhana a primeras horas de la mañana, según ha informado Cruz Roja.
Además, una reportera gráfica ha sido detenida por la Guardia Civil, que la ha acusado de intentar llevarse a inmigrantes en su coche, según ha denunciado la ONG Prodein. Fuentes del entorno de fotógrafa, la colaboradora de AFP Ángela Ríos, han rechazado esa acusación y la han tachado de absurda, recalcando que el salto se ha producido a pocos metros del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).
El joven herido presenta heridas en las manos tras sortear la doble valla de seis metros de altura cada una y los cables entrecruzados que hay entre ambas.
Debido a la importancia de las lesiones que presenta en las extremidades, una ambulancia de Cruz Roja lo ha trasladado al Hospital Comarcal para ser atendido allí por su personal sanitario en Urgencias.
El número de inmigrantes que ha podido pasar aún no ha sido determinado por la Delegación del Gobierno pero se sabe que han sido varios los que lo han conseguido, entre ellos el herido.
Seis horas en la valla
Nueve inmigrantes permanecían encaramados en la zona alta de la valla de Melilla seis horas después del intento de entrada. Fuentes policiales han informado a Efe de que los inmigrantes se niegan a bajar pese a las indicaciones de la Guardia Civil, que, como en otros intentos de entrada similares, ha colocado una escalerilla junto a la alambrada para facilitar el descenso de los subsaharianos, que esperan sentados a seis metros de altura.
El instituto armado mantiene un fuerte despliegue en la zona desde que se registró la intentona, a las 05.20 horas, con varias patrullas de la Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS) que refuerza desde hace meses la frontera de Melilla ante la intensa presión migratoria que sufre la ciudad.
