Sus propuestas irán más allá de la traslación del acuerdo del Congreso y pretenden ser 'el empujón definitivo' a su hoja de ruta
El lehendakari, Patxi López, pretende dar, el próximo 8 de marzo en el Parlamento vasco, una mayor concreción a la hoja de ruta que presentó a finales del pasado mes de septiembre en la Cámara para lograr avanzar en la consolidación de la paz y la convivencia, y dar 'un empujón definitivo' a sus iniciativas, algunas planteadas ya y otras nuevas, encaminadas a cerrar 'el ciclo terrorista'.
Estas fórmulas estarán abiertas a 'las aportaciones' del resto de fuerzas parlamentarias e irán más allá de la mera traslación del Acuerdo del Congreso a la Cámara autonómica, según han informado a Europa Press fuentes del Ejecutivo vasco.
El lehendakari, 'consciente' de que el texto aprobado en la Cámara alta con los votos de PP y PSOE, PNV, CiU e IU-ICV sobre la gestión del final de ETA 'está superado' en la Comunidad Autónoma Vasca, y de que el acuerdo respondió a la intención de UPyD de impulsar la ilegalización de Bildu y Amaiur, realizará planteamientos que supongan 'avanzar' hacia la consolidación de la pacificación, mediante 'iniciativas y foros' que ayuden en este nuevo tiempo político.
El presidente del Gobierno vasco, en base a las 'responsabilidades' que le son 'propias', planteará en el Parlamento sus iniciativas, con la intención de que, posteriormente, se realicen 'aportaciones' que sirvan para lograr un consenso.
Éste será un nuevo paso en el itineriario que Patxi López se ha marcado para lograr sus objetivos y que inició con el decálogo de bases que presentó durante el debate de Política General de la Cámara autonómica el 29 de septiembre de 2011.
Entre otras cuestiones, planteó el acercamiento progresivo de los presos de ETA, si la banda desaparecía y siempre que favoreciera la reinserción de los presos, y 'el reconocimiento legal' de las sensibilidades políticas que cumplan la Ley.
Tras la celebración de la sesión parlamentaria, el 20 de octubre, ETA decretó el cese definitivo de su actividad armada, con lo que López considera que se ha avanzado, 'en parte', en su hoja de ruta, en lo referente a la necesidad de que la banda abandonara el terrorismo y se disolviera.
Posteriormente, el lehendakari abrió 'un periodo de consultas' con la celebración de una ronda de contactos con partidos políticos y agrupaciones sociales, en la que contrastó sus posiciones en este nuevo ciclo político.
Su siguiente paso, después de que el PP accediera al Gobierno central con su victoria en las elecciones generales, fue acudir al Palacio de La Moncloa de Madrid para entrevistarse con el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, con el fin de intercambiar puntos de vista sobre la gestión del fin de ETA.
En el encuentro, el lehendakari insistió en la necesidad de la flexibilización de la política penitenciaria, que contemplaría el acercamiento de presos a cárceles vascas y el desarrollo de una política individual de reinserción, con la concesión del tercer grado a los reclusos que sufran enfermedades graves e irreversibles, y
la legalización de Sortu.
MAYOR CONCRECIÓN
Su comparecencia el día 8 supondría una nueva 'secuencia' que servirá para 'concretar' más su hoja de ruta y plantear nuevas fórmulas con las que abordar la actual situación política y poder 'avanzar' hacia el fin definitivo de la violencia.
El lehendakari, que no olvidará en su intervención a las víctimas, realizará sus planteamientos, 'conociendo' la opinión de las diferentes fuerzas políticas y sociales, y con disposición a que se propongan 'aportaciones' que permitan el consenso y superar las diferencias que mantienen estos colectivos en torno a la cuestión de la paz y la convivencia.
Estas fórmulas estarán abiertas a 'las aportaciones' del resto de fuerzas parlamentarias e irán más allá de la mera traslación del Acuerdo del Congreso a la Cámara autonómica, según han informado a Europa Press fuentes del Ejecutivo vasco.
El lehendakari, 'consciente' de que el texto aprobado en la Cámara alta con los votos de PP y PSOE, PNV, CiU e IU-ICV sobre la gestión del final de ETA 'está superado' en la Comunidad Autónoma Vasca, y de que el acuerdo respondió a la intención de UPyD de impulsar la ilegalización de Bildu y Amaiur, realizará planteamientos que supongan 'avanzar' hacia la consolidación de la pacificación, mediante 'iniciativas y foros' que ayuden en este nuevo tiempo político.
El presidente del Gobierno vasco, en base a las 'responsabilidades' que le son 'propias', planteará en el Parlamento sus iniciativas, con la intención de que, posteriormente, se realicen 'aportaciones' que sirvan para lograr un consenso.
Éste será un nuevo paso en el itineriario que Patxi López se ha marcado para lograr sus objetivos y que inició con el decálogo de bases que presentó durante el debate de Política General de la Cámara autonómica el 29 de septiembre de 2011.
Entre otras cuestiones, planteó el acercamiento progresivo de los presos de ETA, si la banda desaparecía y siempre que favoreciera la reinserción de los presos, y 'el reconocimiento legal' de las sensibilidades políticas que cumplan la Ley.
Tras la celebración de la sesión parlamentaria, el 20 de octubre, ETA decretó el cese definitivo de su actividad armada, con lo que López considera que se ha avanzado, 'en parte', en su hoja de ruta, en lo referente a la necesidad de que la banda abandonara el terrorismo y se disolviera.
Posteriormente, el lehendakari abrió 'un periodo de consultas' con la celebración de una ronda de contactos con partidos políticos y agrupaciones sociales, en la que contrastó sus posiciones en este nuevo ciclo político.
Su siguiente paso, después de que el PP accediera al Gobierno central con su victoria en las elecciones generales, fue acudir al Palacio de La Moncloa de Madrid para entrevistarse con el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, con el fin de intercambiar puntos de vista sobre la gestión del fin de ETA.
En el encuentro, el lehendakari insistió en la necesidad de la flexibilización de la política penitenciaria, que contemplaría el acercamiento de presos a cárceles vascas y el desarrollo de una política individual de reinserción, con la concesión del tercer grado a los reclusos que sufran enfermedades graves e irreversibles, y
la legalización de Sortu.
MAYOR CONCRECIÓN
Su comparecencia el día 8 supondría una nueva 'secuencia' que servirá para 'concretar' más su hoja de ruta y plantear nuevas fórmulas con las que abordar la actual situación política y poder 'avanzar' hacia el fin definitivo de la violencia.
El lehendakari, que no olvidará en su intervención a las víctimas, realizará sus planteamientos, 'conociendo' la opinión de las diferentes fuerzas políticas y sociales, y con disposición a que se propongan 'aportaciones' que permitan el consenso y superar las diferencias que mantienen estos colectivos en torno a la cuestión de la paz y la convivencia.
