La concentración de miles de personas está colapsando los accesos al aeropuerto
Las protestas de colectivos independentistas contra la sentencia del `procés` están colapsando los accesos por carretera al aeropuerto de El Prat y ya han provocado la cancelación de una veintena de vuelos, según ha informado Aena.
Fuentes de Vueling, la principal aerolínea de El Prat, han asegurado a Efe que estas protestas, que están provocando el corte de la C-31, dificultan tanto la llegada de tripulaciones de las aerolíneas, como de trabajadores del propio aeropuerto y de pasajeros, y han añadido que han tenido que cancelar por ahora 15 vuelos con salida desde Barcelona.
Este mediodía, el colectivo independentista Tsunami Democràtic ha llamado a colapsar y a paralizar el aeropuerto como respuesta a la sentencia del procés, que se ha dado a conocer esta mañana.
La movilización de varios miles de personas desde Barcelona hasta el aeropuerto de El Prat, tanto a pie desde la Gran Via como en tren, en metro y en vehículo privado, está complicando seriamente los accesos al recinto aeroportuario.
A esta ahora, varios miles de personas permanecen en la terminal 1 de El Prat protestando de forma pacífica por las condenas impuestas a los dirigentes independentistas, en medio de un gran dispositivo policial.
Un control policial impide pasar a la zona de facturación a las personas que no acreditan con un documento oficial y una tarjeta de embarque que deben coger un vuelo.
No obstante, la concentración de varios miles de personas en la terminal y en las inmediaciones al aeropuerto ha provocado el colapso de uno de los principales accesos al aeropuerto, la C-31, que permanece cortada en ambos sentidos.
Una muestra del colapso es la dificultad con la que circula el Aerobús, el servicio de autobús que conecta Barcelona con el aeropuerto, y que está tardando más de dos horas en recorrer una distancia que, en condiciones normales, se cubre en poco más de media hora.
El colectivo Tsunami Democràtic pide a los manifestantes que se desplazan en coche que pasen por las proximidades del centro de control de tráfico aéreo y que lo hagan "poco a poco, sin prisa".
El objetivo de los que llegan a la T-1 es protagonizar una sentada ante el control de seguridad, según las consignas que difunde este colectivo. En caso de no poder entrar en el vestíbulo, se pide a los manifestantes que se sienten frente a la puerta principal de salidas.
Fuentes de Vueling han explicado a Efe que en función de cómo evolucionen los acontecimientos tomarán las decisiones oportunas, y no descartan que haya más cancelaciones ante la dificultades de las tripulaciones y los aeropuertos para llegar a El Prat.
La protesta está obligando a pasajeros, y también a tripulaciones de aerolíneas, a llegar a pie con sus maletas al aeropuerto, y también está dificultando el relevo horario del personal de esta infraestructura, según fuentes de compañías aéreas.
Fuentes de Vueling, la principal aerolínea de El Prat, han asegurado a Efe que estas protestas, que están provocando el corte de la C-31, dificultan tanto la llegada de tripulaciones de las aerolíneas, como de trabajadores del propio aeropuerto y de pasajeros, y han añadido que han tenido que cancelar por ahora 15 vuelos con salida desde Barcelona.
Este mediodía, el colectivo independentista Tsunami Democràtic ha llamado a colapsar y a paralizar el aeropuerto como respuesta a la sentencia del procés, que se ha dado a conocer esta mañana.
La movilización de varios miles de personas desde Barcelona hasta el aeropuerto de El Prat, tanto a pie desde la Gran Via como en tren, en metro y en vehículo privado, está complicando seriamente los accesos al recinto aeroportuario.
A esta ahora, varios miles de personas permanecen en la terminal 1 de El Prat protestando de forma pacífica por las condenas impuestas a los dirigentes independentistas, en medio de un gran dispositivo policial.
Un control policial impide pasar a la zona de facturación a las personas que no acreditan con un documento oficial y una tarjeta de embarque que deben coger un vuelo.
No obstante, la concentración de varios miles de personas en la terminal y en las inmediaciones al aeropuerto ha provocado el colapso de uno de los principales accesos al aeropuerto, la C-31, que permanece cortada en ambos sentidos.
Una muestra del colapso es la dificultad con la que circula el Aerobús, el servicio de autobús que conecta Barcelona con el aeropuerto, y que está tardando más de dos horas en recorrer una distancia que, en condiciones normales, se cubre en poco más de media hora.
El colectivo Tsunami Democràtic pide a los manifestantes que se desplazan en coche que pasen por las proximidades del centro de control de tráfico aéreo y que lo hagan "poco a poco, sin prisa".
El objetivo de los que llegan a la T-1 es protagonizar una sentada ante el control de seguridad, según las consignas que difunde este colectivo. En caso de no poder entrar en el vestíbulo, se pide a los manifestantes que se sienten frente a la puerta principal de salidas.
Fuentes de Vueling han explicado a Efe que en función de cómo evolucionen los acontecimientos tomarán las decisiones oportunas, y no descartan que haya más cancelaciones ante la dificultades de las tripulaciones y los aeropuertos para llegar a El Prat.
La protesta está obligando a pasajeros, y también a tripulaciones de aerolíneas, a llegar a pie con sus maletas al aeropuerto, y también está dificultando el relevo horario del personal de esta infraestructura, según fuentes de compañías aéreas.
