Según los datos de Egatur para el año 2016, último publicado, el mercado del turismo vinculado a los eventos o competiciones deportivas facturó más de 10.000 millones de euros y se calcula que unos 10 millones de turistas han consumido algún tipo de producto relacionado con estas actividades. En este contexto, Ourense muestra sus potencialidades con la celebración de eventos como el Rally de Ourense con otros más novedosos y con gran potencial como el remo o el cicloturismo.
El turismo, es sin duda, un gran motor de la economía, pero cada vez más debe ser diversificado y en este sentido, junto con el turismo cultural, el deportivo surge con fuerza en una sociedad que cada vez más apuesta por la cultura de la salud y la actividad física. Las maratones más populares del mundo, como pueden ser las de Nueva York, Boston, Chicago, Londres, Berlín o Tokio, también conocidos como ‘los Majors’, son capaces de generar más de 1.000 millones de dólares cada año. La organización de Nueva York se calcula que gana 370 millones de dólares solo en la inscripción de participantes. E incluso más en el caso de Chicago, que cobra 395 dólares por inscripción.
Las cifras mandan, y cada vez más. Los dirigentes políticos desarrollan programas específicos de fomento del turismo vinculado a actividades deportivas. Un ejemplo lo encontramos en la provincia, donde acontecimientos como el Rally de Ourense dejan hasta 970.000 euros en un fin de semana por la llegada de más de 6.000 aficionados, con un gasto medio por aficionado de 161,45 euros, muy superior a la media habitual de gasto turístico, que suele estar entre los 40 y los 60 euros. Todos estos resultados se desprenden del trabajo realizado por investigadores de la Universidad de Vigo.
Este mismo grupo de investigadores universitarios de la Universidad analizó el resultado de una campaña del Obradoiro en ACB desprendiendo del trabajo una cifra de más de 3.400.000 euros de ingresos para la ciudad.
Estas cifras nos dan a las claras el nivel de desarrollo de este sector. Ante esta realidad los distintos agentes sociales se han lanzado a organizar y desarrollar acciones de fomento del turismo a través de iniciativas como las pruebas de competición o los eventos de evasión.
PLANES EN OURENSE
En Ourense, y de la mano del Inorde, entidad que se encarga de la promoción turística de la provincia, unido a los esfuerzos del sector privado, han desarrollado un plan de acción que pretende poner en valor el turismo de las acciones deportivas y a la vez aprovechar los recursos naturales.
El proyecto parte del nacimiento de acciones ya en marcha como el éxito del centro de remo Cerlac, (Centro de entrenamiento de remo de Laias, Arnoia y Castrelo), ubicado entre los embalses de Castrelo de Miño y Frieira, que ha sido durante los últimos años centro de entrenamiento de equipos de diferentes países, como Bielorrusia, Holanda, Australia, Estonia, Inglaterra, Suecia, Bulgaria, Rumanía y España.
Hay equipos punteros, como el femenino de Oxford, que ya van por la tercera estancia en la provincia. Las cifras hablan de su éxito y se espera para este año la asistencia de 1.200 remeros lo que implica más de 19.000 estancias en la zona, según datos del Inorde.
A estas modalidades debemos sumar la Vuelta a España, que volverá a dejar los hoteles llenos con la llegada de más de 2.500 personas de la comitiva, entre participantes y organización. O la inversión de 5,1 millones de euros en nuevos cañones de nieve que supondrá la dotación de 29 cañones para la fabricación de nieve artificial en Manzaneda, y por lo tanto asegurar una mayor oferta de días de nieve para los deportes de invierno. El resultado final supone recibir más de 20.000 visitantes por temporada.
Además, desde el Inorde se fomentarán nuevas iniciativas como la Strade Termal, un evento ciclista que se celebrará en abril y que tiene ya en torno a 400 inscritos, muchos de ellos de varios países europeos. O el desarrollo de la “Gladiator Race”, una prueba encasillada en lo que se llaman los deportes retadores. Por lo tanto, abre el abanico a nuevos deportes que se sumen al futbol, baloncesto y deporte de aventura como el barranquismo, senderismo, montañismo, etc.
Un punto añadido importante: esto supone la desestacionalización de este tipo de oferta de turismo, alejada del verano y que refuerza su posición como motor económico del rural y en general del sector del turismo. El Anuario de Estadísticas Deportivas 2017 elaborado por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (MECD), junto al Consejo Superior de Deporte (CSD), nos indica que el volumen medio anual de empleo vinculado al deporte ascendió en el año 2016 a 194.000 personas, lo que supone en términos relativos un 1,1% del empleo total.
Eso supone colocar a España en el tercer lugar de Europa por debajo de Reino Unido (más de 400.000) y Alemania (más de 220.000). El sector aglutina a 33.071 empresas en el territorio nacional, en la prestación de servicios como gestión de gimnasios, instalaciones deportiva, ofertas especializadas de deporte de aventura, o de fabricación de productos para su uso deportivo.
En definitiva, el deporte ya no solo es una fuente de salud sino también de ingresos y de desarrollo del sector del turismo y, de paso, estimular la economía del entorno.
