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Los jóvenes muestran sus capacidades para crecer profesionalmente en STL

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photo_camera Aspecto que reflejaban las mesas en las que se sentaron aspirantes y managers de STL.

La facultad de Empresariales y Turismo del campus de Ourense es la anfitriona de un proceso de selección para futuros becarios de la compañia textil

La facultad de Empresariales y Turismo del campus de Ourense es esa mañana un hervidero de sensaciones. La institución académica es la anfitriona de un proceso de selección para futuros becarios de Sociedad Textil Lonia (STL). Se respira ilusión, nervios y emoción: la Universidad renueva su alianza con la empresa, la textil ourensana ensaya un nuevo sistema de captación de talento y los aspirantes tienen la oportunidad de entrar a formar parte de STL subiendo el primero de una serie de peldaños llenos de retos, esfuerzo, dedicación y, por supuesto, recompensas.

El aula de la facultad no es el de otras ocasiones. Un café a sus puertas rompe el hielo: los aspirantes interactúan entre ellos y comienzan a saludarse con algunos directivos de la compañía, que para la ocasión han dejado en la fábrica de Pereiro de Aguiar  el ajetreo propio de STL para participar en el proceso de selección. “Esta es la primera vez que hacemos algo así, implicando a los mánagers, reuniendo a todos los alumnos para participar en un proceso de captación de talento”, destacan en el departamento de Recursos Humanos, organizador del encuentro. “Hemos creído oportuno dejar el proceso de selección habitual y realizar algo más creativo, más directo”, subrayan.

La compañía textil ourensana publicó a través de la Cátedra STL que tiene en la Universidad de Vigo una oferta y a ella acudieron 18 alumnos. Su expediente académico es su mejor carta de presentación, “pero preferimos no hacer cribas partiendo solo de su currículum, sino que queríamos tener la oportunidad de que nos conociésemos” a través de un formato de acceso laboral con  claros perfiles novedosos.

Los aspirantes al empleo han compartido toda una mañana codo con codo con los managers de STL. Los primeros se acercaron a la realidad de la empresa y los segundos conocieron los matices de los alumnos. “Ambas partes están ilusionadas”, dicen en la compañía.  Entre los aspirantes están los cinco que van a ser seleccionados para incorporarse a la firma ourensana.
La propia Universidad realiza una labor de filtrado de candidatos y luego la empresa asume el protagonismo para el momento de la verdad. ¿Cuáles son los méritos que se analizan en los aspirantes? Varias son las condiciones que se valoran, pero siempre habrá unos parámetros básicos: un buen nivel de inglés, acreditar también un buen expediente académico y aptitudes para un trabajo que se desarrolla dentro de un sector que opera en entornos muy cambiantes. “La empresa exige y nosotros también les exigimos, pero oportunidades dentro de STL hay muchas”, indican fuentes de la compañía. 

“EL PREMIO ES GRANDE”
En los últimos meses se han producido catorce incorporaciones a través de una beca y once se han quedado como contratados en diferentes departamentos. Quizá la sensación que trasmite un integrante del departamento de Recursos Humanos define el proceso: “El premio es grande, tienes tu primera experiencia laboral y te puedes quedar en una empresa muy importante”.
Sin duda STL (nacida en el año 1997) tiene todas las condiciones para considerarse una firma líder. Fabrica y comercializa las colecciones de Carolina Herrera y Purificación García en sus instalaciones de Pereiro de Aguiar. Es la base de operaciones de una compañía que mantiene más de 700 puntos de venta en países de Europa, Oriente Medio, Asia, Estados Unidos y Latinoamérica.

Una vez que los candidatos a formar parte de la empresa superan el proceso de selección y franquean la puerta les esperan muchos departamentos en los que podrán crecer profesionalmente. Las áreas de Recursos Humanos, compras, operaciones de retail, financiera o logística son una parte en las que podrán desarrollar el plan de carrera. 

En STL afirman que “son departamentos en los que a nivel de equipo hay tiempo para realizar una buena labor de tutoría ya que el equipo y el mánager van a tener opciones de hacer un seguimiento, se les dedica tiempo durante los seis meses de la beca”. Dicho de otra manera: “Se trata de poner en valor a las personas para crear una cantera de talento, que es uno de nuestros empeños”, sostienen.

Los jóvenes que participan en el proceso de selección acreditan mucha ilusión, que acaba pesando también en los méritos que se exponen ante la compañía. Algunos están acabando su carrera universitaria o incluso hace poco que lo han hecho, por lo tanto parte de ellos aún no han hecho prácticas. “El contacto curte y te hace madurar”, indica la compañía. Es  lógico ya que los candidatos han acumulado años de formación teórica que deben contrapesar con la práctica, con el día a día de una empresa que trabaja con un ritmo muy intenso. En la misma maleta que traen la ilusión transportan sus iniciativas, dispuestas a ponerlas al servicio de la textil. En el departamento de Recursos Humanos saludan esa buena disposición y ponen su empeño en “que aterricen de pie después de adaptarse de la teoría a la práctica y, si lo consiguen, los resultados son excepcionales”.

Las puertas están abiertas y, como indican en STL, “si crees tener habilidades, ser proactivo, tener actitud e inquietud y ganas de aprender, acércate”. 

Los principios básicos de una jornada diferente

Sociedad Textil Lonia ha protagonizado una jornada de reclutamiento diferente en la Universidad. Además de captar talento STL demuestra su voluntad de acercarse a los perfiles profesionales gallegos y ourensanos en particular, busca que la provincia y la comunidad ganen visibilidad y que “los jóvenes puedan hacer carrera en una empresa líder”, matizan fuentes de la compañía. Al final el proceso lo que persigue es “encontrar gente que se muestre como ellos son, que sean capaces de sacar lo mejor de ellos mismos, que lo brinden y que sean capaces de desarrollarse y crecer profesionalmente”. La motivación se puso de manifiesto en el intercambio de experiencias compartidas por los managers y los aspirantes. Ambas partes han sacado conclusiones. Y han sido muy positivas. 

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