Ramón Seijas Pérez es el presidente de Acauto, la patronal que reúne a los concesionarios de automóvil de Ourense. También es el gerente de Bétula Cars, que distribuye la marca Opel. El 2017 ha concluido en un ambiente de satisfacción en el sector, porque las matriculaciones crecieron un 7% en la provincia. Rejuvenecer el parque automovilístico y atender con eficacia un mercado tan cambiante están entre los retos de Acauto y de su presidente.
¿Qué balance hace de las ventas en el 2017?
Creo que el 2017 ha sido un año positivo porque el crecimiento de las ventas ha sido importante, con un aumento de casi un 7% en Ourense y el mercado de particulares ha crecido más que la media gallega, aunque un poco menos que la media nacional. Eso nos lleva a ser optimistas y hay que estar contentos con ese comportamiento.
Los datos han sido buenos también en el canal empresas. ¿Qué significado tiene?
Este apartado es el que ha tenido el crecimiento más importante no solo en Ourense, sino en Galicia y España. Sin embargo, creo que ese mercado hay que depurarlo porque no es oro todo lo que reluce, porque a donde se está dirigiendo el sector es a alcanzar los objetivos que le pone la marca y para llegar a ellos se suele ir a la automatriculación o a las llamadas matriculaciones tácticas.
Lo que hacen es que a final de cada mes los concesionarios matriculan coches que luego se venden como kilómetros cero. Eso es lo que hace que el canal de empresas se incremente más de lo que lo está haciendo.
Por lo tanto, con esa labor de depuración salen unos datos pobres.
Lo que está claro es que el mercado de particulares ha crecido y de eso no nos cabe ninguna duda y en Ourense ha sido de casi un 3%. Eso es lo que nos da el pulso de lo que ha crecido el consumo, que está directamente vinculado a las compras de los particulares. En ese sentido, esta modalidad de venta nos indica que con respecto al año pasado se ha vendido más.
¿Qué en España ha crecido un 4,34%? Pues sí, porque hay un ritmo más acelerado en otras provincias que la que tenemos en Ourense o en Galicia. En ese sentido debemos estar satisfechos de cómo han ido las cosas, si bien es cierto que el mercado ha crecido un 24%, que es una cifra muy importante.
Que se incremente de esta manera tan importante las matriculaciones en el canal de empresas solo obedece a las matriculaciones tácticas. Los fabricantes tienen un objetivo de venta y si el mercado no lo consigue, los concesionarios hacen automatriculaciones. De hecho, casi el 30% de las matriculaciones que se producen en el mes se realizan en los dos o tres últimos días.
Si la venta de automóviles revela el estado del consumo, podemos concluir que la economía va mejor?
No hay ninguna duda. Hay que ser optimista y ver de dónde veníamos y lo que hay ahora. El mercado se está consolidando y a nivel nacional se venden un millón doscientas mil unidades y yo creo que es una cifra muy significativa, muy racional y que indica una evolución favorable.
La antigüedad del parque sigue siendo muy alta y existe una necesidad imperiosa de ir renovando el parque automovilístico. Esa cifra nos permite pensar que vamos por el buen camino y que la antigüedad de ese parque vaya bajando. Eso supondrá que la seguridad vial será mayor, la contaminación será menor y que sea mucho más seguro y eficiente circular por las carreteras.
Para que eso suceda es necesario que se sigan incentivando las compras con los planes Pive para completar la renovación. Ahora no hay ninguno en marcha pero estoy convencido de que se pondrá en marcha alguno, no solo por la antigüedad de los coches sino por el medio ambiente u otro tipo e incentivos que posiblemente también redunden en esa renovación que a todos nos interesa.
¿Por qué es tan antiguo el parque automovilístico en Ourense?
Creo que son hábitos de consumo. En algunas ciudades españolas están apareciendo otros operadores y diferentes formas de consumo como Car to Go, Bla, Bla Car, que hacen que el mercado se dinamice. Creo que todavía no son significativas estas plataformas como canales de venta, pero sí adelantan hacia donde va el consumo.
A Ourense estas nuevas tendencias todavía no han llegado y, por otra parte, tenemos una población mayor, lo que asienta determinadas formas de compra. Está claro que una persona con 70 años no tiene las mismas necesidades, por lo tanto es necesario hacer una oferta que se adecúe a lo que hay en Ourense, que tampoco es una demanda tan radical como en otras ciudades.
¿Está el mercado dejando atrás los motores diesel?
El diesel sigue teniendo su peso, aunque ha perdido peso específico respecto al que tenía hace siete u ocho años. En la medida en la que la administración vaya empujando hacia otro tipo de productos, eso se va a ir notando. Los coches de energías alternativas, en la medida en la que tengan ayudas frente a los de combustión convencional, tendrán más aceptación.
Nadie quiere contaminar, siempre y cuando el precio por no hacerlo sea compatible. Hoy los motores cada vez son más eficientes y las emisiones cada vez están más controladas y desde el punto de vista de las ventas el equilibrio será cada vez mayor.
¿Cuál es la posición que tiene en estos momentos Betula Cars en el mercado ourensano?
Como concesionario Opel hemos hecho un año muy positivo. Llevamos comercializando la marca desde hace cuatro años y hemos hecho ejercicios muy buenos. La marca Opel está pasando por un momento complejo porque ha sido absorbida por el grupo PSA Peugeot Citroen y eso está suponiendo cierta inestabilidad, pero cuando las aguas se calmen, que se calmarán inmediatamente, seguiremos teniendo una posición muy importante.
Como producto nunca hemos tenido una gama tan vanguardista y completa como la que tenemos hoy y en ese sentido la marca y nosotros creo que estamos realizando una magnífica labor.
