FORO LA REGIÓN

Augusto Baena Reig: "La industria 4.0 cambiará por completo los empleos"

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photo_camera Augusto Baena Reig, socio de la consultora Oliver Wyman.

 El socio de la consultora Oliver Wyman Augusto Baena Reig protagoniza hoy, a las 13,30 horas, el almuerzo-conferencia de Foro La Región "Mejora de la competitividad empresarial a través de la digitalización" que se desarrollará en el restaurante A Carballeira. La entrada es por invitación. 

¿Cuáles son las claves de esta mejora de la competitividad?

Lo que está ocurriendo es que la digitalización y la accesibilidad a las nuevas tecnologías, gracias a la bajada de costes, están haciendo que muchos procesos empresariales estén cambiando de forma radical, dirigiéndose hacia formas de trabajar más productivas. Las primeras en adoptar esas formas productivas tendrán una ventaja inicial y las que no, podrían verse en problemas después para competir con el resto. El hecho es que las empresas deberán cambiar con la era digital.

¿En qué consisten esas nuevas formas productivas?

Existe una tendencia importante hacia una mayor recogida de datos (eficiencia interna de los procesos, transacción con los proveedores...). Todo esto genera una gran cantidad de información que luego es analizada otra vez por medio de las nuevas tecnologías, mediante nuevos algoritmos de inteligencia artificial que permiten determinar patrones que mejoren la eficacia de la empresa y su tiempo de respuesta o la calidad y cantidad de la información. De hecho estamos ante la denominada cuarta revolución  industrial, que en cinco o 10 años cambiará totalmente el mercado laboral y su actual marco de relaciones.

¿Qué ejemplo se podría poner de esta realidad?

Si tomamos la impresión 3D, que básicamente es una impresora que esculpe un bloque de acero y crea una pieza, esto que no parece tan relevante permite, por una parte, que cada pieza puede ser diferenciada de las otras sin aumentar coste, cosa que no ocurre en los procesos productivos normales, donde tienes que hacer una misma pieza mil veces, y en segundo lugar, al ser máquinas cada vez más asequibles, puede permitir, por ejemplo, a un taller fabricar un repuesto de automóvil en el momento en lugar de tener un stock de piezas que no sabes si van a tener salida.

¿Cómo afectará, por ejemplo, a los medios de comunicación?

En este sector afecta de múltiples maneras. Ya ocurre, de hecho, que la portada de un medio de comunicación cuando accedes a la web se va adaptando, tanto la publicidad como las propias noticias que van a ser seleccionadas, en función de lo que el lector va dejando caer pinchando más sobre unas cosas u otras. Incluso hay experimentos por los cuales algoritmos de aprendizaje automático son capaces de redactar noticias en base a información que, por ejemplo, les puede señalar que el Real Madrid ha ganado a tal equipo en tal competición. Es posible que no sean capaces de realizar crónica o análisis, pero sí una noticia corta basada en datos. En todo caso, no va a haber ningún sector que esté a salvo de esta revolución.

¿Esto reducirá el empleo?

No, simplemente habrá que adaptarse. De hecho, las economías con más robots per cápita en la actualidad, Alemania y Japón, son las que menos paro tienen y Alemania está pidiendo continuamente mano de obra, pero la quiere cualificada. Lo que se está haciendo es reducir el coste de un determinado proceso productor y llevarlo a otra parte para generar valor.

¿Cuáles son las líneas maestras para que una empresa se agarre a este carro de la cuarta revolución industrial a tiempo?

Lo primero, hacer una reflexión sobre cómo ve uno el futuro a medio plazo de esa empresa, no hace falta que sea muy preciso. Es posible que necesite alguna ayuda externa para determinar ese posible escenario futuro. El segundo paso es que necesitará un proceso de remodelación interna y de movimiento de personas. Precisará traer a otros perfiles y adaptar a los nuevos tiempos a los que ya tiene en su plantilla.

¿Qué más pasos deberá dar?

Un tercer paso sería tener claro que, aunque esa recogida de datos referente a la empresa no tenga una inmediata aplicación a corto plazo, sí que será útil en el medio plazo para cambiar los procesos, la logística de la empresa, etcétera. Porque es posible que hoy en día no cuente con los algoritmos para analizar esos datos, pero sí puede que contemos con ellos  a medio plazo. Finalmente, es recomendable hacer pilotos o pequeños proyectos, con grupos reducidos de personas dentro de la empresa que me permitan testar los posibles pros y contras de esa  línea de futuro por la que está apostando, con el fin de ir detectando posibles problemas mediante la aplicación del sistema de prueba y error, además de crear un grupo que ya sirve de guía al resto en ese nuevo concepto empresarial.

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