El director general del Pastor destacó el apoyo decidido de este banco a las pymes
n n n El director general del Banco Pastor, Fernando Merino, se ocupó de la introducción del almuerzo-coloquio sobre la empresa familiar, señalando a "Ignacio Rivera, consejero delegado de Hijos de Rivera, y José Ramón Pérez Nieto, presidente ejecutivo del Grupo Pérez Rumbao, como dos ejemplos a seguir a nivel empresarial".
Merino añadió que en el mundo empresarial "la experiencia es un grado", y en este sentido, recordó que el Banco Pastor "lleva 90 años de historia trabajando por y para las pequeñas y medianas empresas, por tanto, nuestro conocimiento es muy amplio" y que más de 50.000 empresas en Galicia "confían en nosotros". Por otra parte, quiso subrayar que "las empresas son el agente más importante en la generación de empleo y riqueza de nuestra economía y, por tanto, nuestra misión es facilitar su labor".
En este sentido, destacó el papel del Pastor: "El 59 % del crédito concedido por la entidad en España, hasta junio de este año, fue para autónomos y pequeñas y medianas empresas; y nuestra cuota de mercado de crédito a empresas aumentó en 26 puntos básicos, alcanzando ya el 12,37 %."
El máximo responsable del Banco Pastor señaló que la entidad ha comenzado una nueva etapa, y "gracias a nuestra larga experiencia, tenemos las herramientas suficientes para hacer frente a las dificultades que se aproximen". Matizó que esos cambios y esa adaptación a los cambios que ha experimentado la economía y el sistema financiero no debe implicar una reflexión negativa, sino una oportunidad".
El director del Pastor recordó que la entidad había suscrito una ampliación de capital de 2.500 millones de euros en junio, que tuvo una demanda de 3.400 millones, y una reestructuración del negocio, separando la gestión principal de la relacionada con el negocio inmobiliario y asociado.
También se ha afrontado por parte del Pastor la creación de la dirección de transformación digital. "Queremos potenciar nuestra presencia en el negocio digital, gracias al que podremos adaptarnos a las nuevas exigencias de nuestros clientes", dijo.
Por otra parte, explicó que "estamos inmersos en un proceso de optimización de los recursos con el fin de transformar y adaptar las actuales estructuras territoriales de apoyo a la red comercial, optimizar la red de sucursales y redimensionar los servicios corporativos y áreas de servicios centrales. Los cambios en el sector financiero requieren de respuestas firmes".
Este proceso de optimización avanzó que contribuirá, tanto a preparar y modernizar las estructuras organizativas de la entidad para adaptarlas a la evolución de la banca digital.
También ayudará a mejorar la relación coste-beneficio del negocio, "consolidando nuestra vocación de independencia en beneficio de los intereses de los clientes, empleados y accionistas. El negocio bancario está cambiando y lo prudente es ir por delante".
