Una embarcación vasca, el 'Alakrana', logró eludir el ataque de un barco pirata a 495 millas de la costa de Somalia, según informó el patrón del buque, el gallego Ricardo Blachh, quien atribuyó 'la suerte' que tuvieron de poder escapar al mal tiempo, así como el hecho de que las redes estuvieran recogidas.
El 'Alakrana' es un atunero con bandera española y que cuenta con 40 tripulantes, de los cuales seis son gallegos, incluido su patrón mayor, que es de Baiona (Pontevedra). Conviven con tripulantes de muy diversos orígenes, procedentes de Senegal, Gana, Costa de Marfil, Madagascar o Indonesia.
Los hechos se produjeron alrededor de la una de la tarde, hora española, cuando la embarcación se encontraba en posición 0450 Norte-5453 Este. Las pequeñas dimensiones del barco atacante --alrededor de diez metros de eslora-- impidió que el sistema de radares lo localizara hasta que éste se encontraba cerca del 'Alakrana', dentro de las siete millas.
Con el objetivo de verificar que podían ser objeto de un ataque, el buque realizó diversas maniobras, con cambios de rumbo, que fueron secundadas por sus perseguidores, por lo que, finalmente, decidió navegar a toda máquina y 'escapar al viento, dejándole atrás'.
'Ellos andaban a siete nudos y nosotros a más de 19, y logramos escapar porque hacía mal tiempo, porque si hubiera habido calma nos hubiera pillado', afirmó Ricardo Blanch. Se da la circunstancia, además, de que la tripulación acababa de 'embarcar la red', porque 'con ella en el agua' no hubieran podido maniobrar, 'porque pesa cien toneladas'.
FRAGATA
El patrón del 'Alakrana', de 58 años de edad y que lleva 'toda la vida' en el mar, afirmó que esta pasada noche se produjo la llegada de una fragata holandesa, con la que mantuvieron contacto durante toda la noche, si bien no logró localizar a la embarcación pirata.
Explicó además que el temor de los tripulantes es que, a partir de mediados de septiembre, con la calma propiciada por la buena situación meteorológica, se incrementen los problemas en la zona.
MAS PROTECCION
Según el patrón, aunque los barcos españoles 'agradecen' la presencia de la fragata 'Canarias' española en la zona, consideran que el avión debería sobrevolar las aguas con más asiduidad. Además, creen que el Gobierno debería secundar la iniciativa francesa, que ha instalado cuatro militares armados a bordo de cada buque galo.
'En vez de ir a mejor, vamos a peor', aseveró Ricardo Blanch, quien criticó que no saben 'nada' del avión de protección 'desde hace unos días'. En todo caso, indicó que el 9 de septiembre hay una reunión en Madrid de los armadores para ver si se pueden articular otras medidas de protección.
Al respecto, explicó que en los barcos de su misma empresa, pero con bandera de Seychelles, el Gobierno sí permite llevar a personal de una empresa privada de seguridad que van armados para poder repeler 'con más garantías' los ataques de los piratas.
El es el segundo intento de ataque que el 'Alakrana' sufre en menos de dos meses, según recordó Ricardo Blach, quien reconoció que 'desde hace un año y medio, la situación se ha puesto muy peligrosa'.
Los hechos se produjeron alrededor de la una de la tarde, hora española, cuando la embarcación se encontraba en posición 0450 Norte-5453 Este. Las pequeñas dimensiones del barco atacante --alrededor de diez metros de eslora-- impidió que el sistema de radares lo localizara hasta que éste se encontraba cerca del 'Alakrana', dentro de las siete millas.
Con el objetivo de verificar que podían ser objeto de un ataque, el buque realizó diversas maniobras, con cambios de rumbo, que fueron secundadas por sus perseguidores, por lo que, finalmente, decidió navegar a toda máquina y 'escapar al viento, dejándole atrás'.
'Ellos andaban a siete nudos y nosotros a más de 19, y logramos escapar porque hacía mal tiempo, porque si hubiera habido calma nos hubiera pillado', afirmó Ricardo Blanch. Se da la circunstancia, además, de que la tripulación acababa de 'embarcar la red', porque 'con ella en el agua' no hubieran podido maniobrar, 'porque pesa cien toneladas'.
FRAGATA
El patrón del 'Alakrana', de 58 años de edad y que lleva 'toda la vida' en el mar, afirmó que esta pasada noche se produjo la llegada de una fragata holandesa, con la que mantuvieron contacto durante toda la noche, si bien no logró localizar a la embarcación pirata.
Explicó además que el temor de los tripulantes es que, a partir de mediados de septiembre, con la calma propiciada por la buena situación meteorológica, se incrementen los problemas en la zona.
MAS PROTECCION
Según el patrón, aunque los barcos españoles 'agradecen' la presencia de la fragata 'Canarias' española en la zona, consideran que el avión debería sobrevolar las aguas con más asiduidad. Además, creen que el Gobierno debería secundar la iniciativa francesa, que ha instalado cuatro militares armados a bordo de cada buque galo.
'En vez de ir a mejor, vamos a peor', aseveró Ricardo Blanch, quien criticó que no saben 'nada' del avión de protección 'desde hace unos días'. En todo caso, indicó que el 9 de septiembre hay una reunión en Madrid de los armadores para ver si se pueden articular otras medidas de protección.
Al respecto, explicó que en los barcos de su misma empresa, pero con bandera de Seychelles, el Gobierno sí permite llevar a personal de una empresa privada de seguridad que van armados para poder repeler 'con más garantías' los ataques de los piratas.
El es el segundo intento de ataque que el 'Alakrana' sufre en menos de dos meses, según recordó Ricardo Blach, quien reconoció que 'desde hace un año y medio, la situación se ha puesto muy peligrosa'.
