El presidente del comité de empresa de Alcoa San Cibrao, José Antonio Zan, ha pedido de nuevo a la ministra de Industria, Reyes Maroto, que “haga su trabajo”, ha apostado por una "intervención total o parcial" de la fábrica y le ha recordado que “si toda Europa está interviniendo empresas”, para evitar que esta crisis se las lleve por delante, “será por algo”.
En ese sentido, opina que el Gobierno de España tiene que hacerle caso a su vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, o incluso fijarse en las propuestas de la canciller alemana, Angela Merkel, en ese sentido, porque “no son tontos”.
El comité de empresa sigue defendiendo que, en el contexto actual, es necesaria una “intervención total o parcial de la empresa”, algo que también recomiendan expertos en el sector del aluminio que “son ajenos” a la propia compañía, sostiene la parte sindical.
Zan recordó que a finales de marzo “Alcoa fue la primera empresa” que fue considerada “esencial” por parte del Gobierno, porque como productora de aluminio primario también abastece a los “sectores farmacéutico y de la alimentación”.
“Somos indispensables”, dijo Zan, porque la producción de aluminio primario para abastecer a otros sectores clave en la economía española “no puede depender de otros países”.
“No es nada malo que se intervenga la empresa y se entre”, por parte del Estado, “en el consejo de administración” para la toma de decisiones estratégicas”, añadió.
En cuanto a la manifestación de ayer, cuando miles de personas cortaron la Autovía del Cantábrico a la altura de Ribadeo, como protesta por todo lo que está sucediendo Alcoa, reconoció que fue una “sorpresa” incluso para el comité.
“Era una protesta a la que solo habían sido convocados los delegados y juntamos a unas 8.000 personas. A Mariña está totalmente volcada con la supervivencia de Alcoa. Con esta fuerza, es seguro que vamos a salir de esto”, ha zanjado.
Protestas más espectaculares
El comité de empresa de Alcoa San Cibrao (Lugo) prepara más protestas "sorpresivas y espectaculares" para los próximos días, después de la movilización con miles de personas del pasado domingo en la que cortaron la autovía A-8 con la quema de neumáticos.
Tras el anuncio de la empresa de iniciar un despido colectivo de 534 trabajadores en la fábrica de aluminio del municipio de Cervo, el presidente del comité de empresa, José Antonio Zan, explica a Europa Press que seguirán "haciendo acciones cada vez más fuertes y contundentes". El objetivo es dejar claro "el problema que generaría el cierre" de la planta.
