El juez del Juzgado de lo Penal número 1 de Pontevedra Juan José Trashorras ha dictado sentencia sobre el caso del joven Manuel Abalo, que fue atropellado mortalmente en 2008 en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra) cuando cruzaba un paso de cebra, condenando al autor del atropello, Pablo Bouzas -apodado 'Castiñeiras' o 'El Casti'- a tres años y seis meses de prisión por los delitos de homicidio imprudente y conducción temeraria.
En su sentencia, el magistrado expone que el 11 de mayo de 2008, sobre las 5.30 horas, Pablo Bouzas conducía por la Avenida de la Marina un Audi A-4 propiedad de su tía con 'desatención de las más elementales normas de precaución y cuidado, pues circulaba a una velocidad notoriamente superior al límite máximo autorizado de 50 kilómetros por hora'.
Además, el juez recuerda que esa velocidad era inadecuada a las circunstancias de la vía 'ya que era sábado por la noche y se trataba de una calle concurrida por ser zona de ocio'. En este contexto, a Bouzas le será retirado el carné de conducir durante cinco años y tendrá que pagar dos tercios de las costas procesales.
Por el contrario, el juez le absuelve del delito de omisión del deber de socorro. Durante el juicio, el abogado de la acusación particular, Gumersindo Paz, renunció en las conclusiones definitivas, ya que en la vista quedó demostrado que el atropellado fue atendido desde un primer momento por las personas que estaban en el lugar, entre las que se encontraba una médico, con lo que eximían al acusado de esta obligación de atender a la víctima.
La acusación particular pedía una pena de doce años de prisión y el padre de la víctima, Manuel Abalo, siempre consideró que realmente se trataba de un asesinato. Sin embargo, el juez en su condena rebajó en seis meses la pena de cuatro años que pidió el fiscal en su escrito de acusación.
DISCREPANCIA DE LA FAMILIA
Tras conocer la sentencia, Manuel Abalo, el padre del joven atropellado, se ha declarado 'indignado' y ha advertido de que el caso debería haber sido juzgado 'de otra manera'. 'Debería ser ejemplarizante', ha sentenciado.
Pese a su discrepancia con la sentencia, la familia está evaluando 'si merece la pena recurrir'. 'Todo esto es demasiado doloroso', ha señalado Abalo, tras explicar que se van a tomar unos días para meditar la decisión.
'El Casti' ingresó en prisión durante cinco meses después de ser arrestado, en octubre de 2008, luego abonó una fianza de 20.000 euros que le permitió salir en libertad condicional.
Además, el juez recuerda que esa velocidad era inadecuada a las circunstancias de la vía 'ya que era sábado por la noche y se trataba de una calle concurrida por ser zona de ocio'. En este contexto, a Bouzas le será retirado el carné de conducir durante cinco años y tendrá que pagar dos tercios de las costas procesales.
Por el contrario, el juez le absuelve del delito de omisión del deber de socorro. Durante el juicio, el abogado de la acusación particular, Gumersindo Paz, renunció en las conclusiones definitivas, ya que en la vista quedó demostrado que el atropellado fue atendido desde un primer momento por las personas que estaban en el lugar, entre las que se encontraba una médico, con lo que eximían al acusado de esta obligación de atender a la víctima.
La acusación particular pedía una pena de doce años de prisión y el padre de la víctima, Manuel Abalo, siempre consideró que realmente se trataba de un asesinato. Sin embargo, el juez en su condena rebajó en seis meses la pena de cuatro años que pidió el fiscal en su escrito de acusación.
DISCREPANCIA DE LA FAMILIA
Tras conocer la sentencia, Manuel Abalo, el padre del joven atropellado, se ha declarado 'indignado' y ha advertido de que el caso debería haber sido juzgado 'de otra manera'. 'Debería ser ejemplarizante', ha sentenciado.
Pese a su discrepancia con la sentencia, la familia está evaluando 'si merece la pena recurrir'. 'Todo esto es demasiado doloroso', ha señalado Abalo, tras explicar que se van a tomar unos días para meditar la decisión.
'El Casti' ingresó en prisión durante cinco meses después de ser arrestado, en octubre de 2008, luego abonó una fianza de 20.000 euros que le permitió salir en libertad condicional.
