En la pelea, en la que se usaron barras de hierro, hubo 7 heridos, entre ellos Sinaí Giménez
Casi un año después de haber superado la escisión y el enfrentamiento entre los feriantes gitanos del área de Vigo, divididos entre gallegos y zamoranos, el conflicto resurgió de nuevo ayer con una reyerta ocurrida en el mercadillo de Cangas. Siete personas, según confirmaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno, resultaron heridas y tres de ellas tuvieron que ser trasladados a diversos centros hospitalarios. En concreto, el servicio de Emergencias 112, aseguró que los heridos tenían contusiones y lesiones en la cabeza producidas por la utilización de barras de hierro.
El suceso se produjo pasadas las nueve y media de la mañana. Según explicó el que fuera candidato a la Alcaldía de Vigo, Sinaí Giménez, “el hermano de un pastor evangelista de los gitanos zamoranos puso el puesto un metro más delante de lo establecido. Una anciana gitana gallega le pidió que lo retirara y entonces intentaron agredirla”. Giménez aseguró que “ni yo, ni el resto de los gitanos gallegos que estábamos íbamos a permitir dicha agresión y salimos en su defensa. Entonces, salieron casi un centenar de zamoranos con las barras de hierro de los puestos. Yo me caí, me di con una mesa en la cabeza, comencé a sangrar y mi gente al ver la sangre se puso muy nerviosa y comenzó la pelea”.
El hijo de los rey de los gitanos y miembro del clan de los morones afirmó que de los feriantes gallegos sólo hubo dos heridos, él que fue por la caída y una mujer a la que se le levantó una uña. El colectivo de comerciantes al que él representa condenó los hechos.
La Guardia Civil y la Policía Local tuvieron que intervenir para garantizar la seguridad, mientras los heridos eran trasladados y aunque no hubo detenidos se abrieron diligencias para investigar estos hechos.
Policía Local y Guardia Civil tomaron ayer el centro de Cangas para vigilar el mercadillo.
