Un juez de Cambados comenzará a tomar declaraciones a los arrestados en la zona de Arousa
Diecisiete personas han sido detenidas hasta ahora por el alijo de 1.500 kilos de cocaína interceptados a bordo del barco 'Coral I' y está previsto que hoy pasen a disposición de la justicia los ocho arrestados en tierra ante el titular del Juzgado de Instrución número 3 de Cambados (Pontevedra), informaron fuentes del caso. El buque, aprehendido en el Atlántico y situado este 6 de enero a ochenta millas al oeste de Cabo Verde, tiene bandera venezolana y los investigadores creen que zarpó de ese país de Suramérica con destino a Galicia.
Según las fuentes consultadas, casi "con total seguridad" el barco, que está navegando por el Atlántico escoltado por el buque insignia de Vigilancia Aduanera, el "Petrel", atracará en el Muelle Militar de las Islas Canarias a finales de esta semana, aunque la decisión final no está cerrada y dependerá del juez instructor de la causa. Las mismas fuentes confirmaron que la operación -de la que por el momento se desconoce el nombre- continúa abierta y, aunque no se prevén más detenciones, ahora se procederá a la apertura de la fase de toma de declaraciones a testigos.
La última operación contra la droga en Galicia dejó un total de ocho detenidos en tierra, de origen gallego y colombiano, tras varios registros efectuados en la provincia de Pontevedra, concretamente en las zonas de Arousa y O Salnés. Uno de ellos se llevó a cabo en el centro de Vilagarcía de Arousa, en la calle Rodrigo de Mendoza; otro en Corvillón, en Cambados, y un tercero en Vilanova de Arousa.
viejo conocido de la policía
Entre los arrestados en estas inspecciones hay un viejo conocido de la policía, Rafael Bugallo Piñeiro, alias 'O Mulo', oriundo del municipio pontevedrés de Cambados, y un empresario, Juan Carlos Nogueira Oubiña, sin antecedentes policiales y con residencia en Vilanova de Arousa, localidad de la misma provincia. 'O Mulo' está considerado por las fuerzas de seguridad como un narcotraficante que se dedica a realizar transporte de hachís y cocaína para varias organizaciones.
Bugallo es experto en hacerse con documentación falsa y también en modificar su apariencia para poder ocultarse en sus fugas. De hecho, estaba en busca y captura tras no regresar a la cárcel en su último permiso penitenciario.
Los otros nueve detenidos conforman la totalidad de la tripulación del barco procedente de Suramérica, todos ellos de nacionalidad venezolana, y en el buque transportaban los 49 fardos de droga que, según las primeras estimaciones, calculan que ascienden a tonelada y media de cocaína. Fuentes policiales indicaron que la droga aún no ha sido trasladada a tierra.
Esta operación, que está bajo secreto de sumario, estuvo coordinada por los Grupos de Respuesta Especial para el Crimen Organizado (Greco) de Galicia y por el Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA).
