Empleados piden 700.000 euros por despido improcedente a la constructora Marbar

Los ex empleados de la constructora Marbar, cuyo propietario está en paradero desconocido desde enero pasado, reclamaron hoy 700.000 euros en concepto de despido improcedente en su comparecencia ante el Juzgado número 5 de lo social de Vigo.
El abogado del sindicato CIG y representante de los 49 empleados, Roxelio Fernández, explicó que están previsto un total de tres juicios por ese asunto.



Además del celebrado hoy para exigir indemnizaciones por despido improcedente, hay otros dos programados en los empleados pedirán compensaciones correspondientes a las horas extraordinarias y otros conceptos.

Marbar debe a sus empleados, que en su mayoría trabajan ahora para otras empresas, más de 1 millón de euros.

Fernández aseguró que hay ’pruebas contundentes’ para demostrar que Marbar cuenta con patrimonio para enfrentarse al impago de sus trabajadores.

Aunque el sindicalista reconoció que la manera más rápida de que los empleados cobrasen esa que la empresa se haga cargo de los pagos tras una sentencia condenatoria, indicó que parte de los activos ya están hipotecados, con lo que el proceso judicial podría ser largo.

Uno de los ex trabajadores, Victorio Campos, confirmó que la mayoría de sus compañeros han encontrado nuevos trabajos y que por ello les resulta difícil vigilar las oficinas de Marbar, ya que se turnan para evitar que desaparezcan la maquinaria.

Otro ex empleado, Rafael Rodríguez, dijo que la empresa de Tomiño cuenta con un patrimonio de tres millones de euros y que por ello puede hacer frente a la deuda contraída con empleados y proveedores.

Durante la vista oral, el abogado de la empresa, Ramón Pena, reconoció por primera vez el paradero desconocido del propietario de Marbar, Manuel Martínez Barros, y dijo tener ’poca documentación’ debido a esa situación.

Pena rechazó la petición de despido improcedente por causas de insolvencia.

Por su parte, el hijo del propietario de la empresa, Marcos Martínez, explicó a la jueza que no tuvo nunca acceso a la contabilidad y que el único administrador de las empresas fue su padre.

Marbar dispone de dos naves en Santa María de Tebra, una cantera en Santa María de Oia y unas 300 viviendas en construcción en el municipio pontevedrés de A Cañiza.

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