Los exdirigentes de los Grapo Manuel Pérez Martínez, alias 'Camarada Arenas', y Victoria Gómez, una de las imputadas por el secuestro de Publio Cordón, calificaron ayer de 'violador' e 'impostor' y añadió que 'olía mal' al exmiembro de la organización Fernando Silva Sande, en el juicio por un atentado en Madrid en 1998.
La Fiscalía mantuvo su petición de 17 años de prisión para los tres exdirigentes de los Grapo acusados de colocar un artefacto explosivo el 29 de enero de 1998 en el restaurante 'Tamara', colindante con la empresa de trabajo temporal People y situado en el número 33 de la Avenida de América, que puso en peligro a los residentes.
Durante el juicio, que se reanuda hoy, los tres acusados se implicaron mutuamente en la campaña contra empresas de trabajo temporal que los Grapo llevaron a cabo en los noventa. El coruñés Silva Sande, que en su día reveló datos sobre el secuestro del empresario Publio Cordón, explicó que en 1998 residía en París y formaba parte del comando central de los Grapo, que 'coordinaba todas las operaciones' de este grupo y estaba integrado por 'cuatro o cinco miembros', entre ellos Pérez Martínez y Victoria Gómez Méndez.
Silva Sande señaló que la decisión sobre la colocación de una bomba en un restaurante de Madrid dentro de una campaña contra las empresas de trabajo temporal se adoptó en una reunión del comando central, en la que estuvieron presentes el 'Camarada Arenas', exsecretario general del Partido Comunista de España reconstituido (PCE-r), y Gómez Méndez. Detalló que no tiene ningún motivo de enemistad con los otros dos acusados y que no se considera dentro de los Grapo, al tiempo que aseguró que todos los miembros de esta organización pertenecían al PCE-r, que era 'como una cantera' para los Grapo.
Por su parte, el 'Camarada Arenas'negó su participación en esa reunión para poner en marcha una campaña de atentados y aseguró que 'jamás' planificó 'cómo, dónde y con quién poner un petardo'.
El fiscal solicitó que los acusados indemnicen a la empresa People con 105.752 e duuros, al restaurante 'Tamara' con 85.261, a la comunidad de propietarios de Avenida de América número 33 y al dueño de un local de este edificio.
Durante el juicio, que se reanuda hoy, los tres acusados se implicaron mutuamente en la campaña contra empresas de trabajo temporal que los Grapo llevaron a cabo en los noventa. El coruñés Silva Sande, que en su día reveló datos sobre el secuestro del empresario Publio Cordón, explicó que en 1998 residía en París y formaba parte del comando central de los Grapo, que 'coordinaba todas las operaciones' de este grupo y estaba integrado por 'cuatro o cinco miembros', entre ellos Pérez Martínez y Victoria Gómez Méndez.
Silva Sande señaló que la decisión sobre la colocación de una bomba en un restaurante de Madrid dentro de una campaña contra las empresas de trabajo temporal se adoptó en una reunión del comando central, en la que estuvieron presentes el 'Camarada Arenas', exsecretario general del Partido Comunista de España reconstituido (PCE-r), y Gómez Méndez. Detalló que no tiene ningún motivo de enemistad con los otros dos acusados y que no se considera dentro de los Grapo, al tiempo que aseguró que todos los miembros de esta organización pertenecían al PCE-r, que era 'como una cantera' para los Grapo.
Por su parte, el 'Camarada Arenas'negó su participación en esa reunión para poner en marcha una campaña de atentados y aseguró que 'jamás' planificó 'cómo, dónde y con quién poner un petardo'.
El fiscal solicitó que los acusados indemnicen a la empresa People con 105.752 e duuros, al restaurante 'Tamara' con 85.261, a la comunidad de propietarios de Avenida de América número 33 y al dueño de un local de este edificio.
