El fiscal solicita trece años de prisión para un padre por abusar de una hija menor

El Ministerio Fiscal solicitó, en sus conclusiones provisionales, una pena de 13 años de prisión por los delitos de abusos sexuales y abusos sexuales con acceso carnal, para un vecino de Lugo de 41 años, de los que supuestamente fue víctima una hija suya de 14, que sufre un retraso mental leve.


El acusado llegó a la Sección Segunda de la Audiencia Provincial desde la prisión de Bonxe, escoltado por agentes de la Guardia Civil, hasta la sala donde se celebra el juicio, a puerta cerrada, en el que estaba previsto que la víctima declarara detrás de un biombo.

Con el fin de preservar a la víctima no se realizó ningún tipo de declaración, por un caso en el que el procesado también se enfrenta a una indemnización de 5.040 euros, por el estrés postraumático que sufrió su hija y otra de 10.000 euros por daños morales.

De prosperar las peticiones del Fiscal, el acusado también perderá la patria potestad de su hija por un período de 6 años.

Además la acusación particular le imputa otro supuesto delito continuado de abusos sexuales, en grado de tentativa, en la persona de una sobrina, por el que interesa 1 año y 4 meses de prisión y eleva las peticiones del Fiscal a algo más de 16 años de cárcel.

Según el escrito del Ministerio Público, el acusado, desde una fecha indeterminada de 2005 hasta el mes de julio de 2006, ’movido por el ánimo de satisfacer su apetito sexual’, acostumbraba a abrazar a su hija mejor acariciándola en sus partes íntimas cuando estaban solos viendo la televisión

También se advierte que en el mismo periodo, ’con ánimo libidinoso’, procedía, con gran frecuencia, a acudir al dormitorio de su hija para ’abrazarla por todo su cuerpo, incluyendo tocamientos genitales’.

En el mismo escrito se indica, además, que desde el 10 de marzo de 2005 hasta el 11 de julio de 2006, el acusado ’con ánimo de satisfacer su apetito sexual’ acudió en un número indeterminado de veces, pero en todo caso superior a dos, junto a su hija ’procediendo a quitarle la ropa y a continuación penetrarla vaginalmente’.

El fiscal advierte que la menor presenta un retraso mental ’leve’ y como consecuencia de la situación vivida, se le diagnosticó un trastorno por estrés postraumático, por el que necesitó un periodo de curación de 6 meses.

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