Fiat, Chrysler, Lancia, Dodge, Maserati, Jeep o Dodge son algunas de las firmas más reconocidas de Fiat Chrysler Automobiles (FCA) que aglutina a una decena de marcas de coches a las que aspira fabricar PSA Vigo. Groupe PSA y FCA enfilan la recta final para su fusión, ya aprobada por los accionistas de ambas multinacionales y que culminará el 16 de enero con la creación de Stellantis, el cuarto mayor fabricante mundial de coches con un volumen de producción de 8,7 millones de vehículos al año. "Supone una gran oportunidad por la gran dimensión que adquiere y no sólo para la planta de Balaídos sino para los proveedores gallegos de automoción que están muy bien posicionados y se abren así nuevas oportunidades", explica Rubén Pérez, responsable comarcal de la federación de industria de UGT.
Los sindicatos ven con buenos ojos que la fábrica viguesa aspire a hacer coches nuevos si bien advierten que habrá "algún tipo de impacto". "Es difícil que sobrevivan todas las plantas en Europa y lo que exigiremos será un acuerdo en firme porque ambos grupos dijeron que no habrá cierres", apunta Santiago Cameselle, secretario general de CC OO en el comité de empresa de PSA Vigo. "Fortalecer y crear sinergias lo vemos positivo, pero la fusión supondrá una competencia fuerte y nos preocupa que acaben pagando los de siempre, los trabajadores", señala el sindicalista que muestra su preocupación por "la falta de cultura sindical que hay en Fiat". "Está muy abandonada, no están acostumbrados a negociar con los representantes de los trabajadores, habrá que constituir un comité europeo", apunta.
La fusión entre PSA y Fiat-Chrysler deja a Vigo en buena posición para construir nuevos coches. La planta de Balaídos es una de las más rentables y competitivas del grupo francés y puntera en electrificación que podría ampliar cartera con la decena de marcas que aporta FCA. En la actualidad, la planta viguesa es, dentro del grupo PSA, la que fabrica para más marcas. Ensambla coches de Citroën, Peugeot, Opel y Vauxhall (Opel en Reino Unido) -todas de PSA- y desde 2019 para el fabricante japonés Toyota. Grupo Fiat, por su parte, no posee ningún centro de producción en España.
La fusión de ambos grupos dará lugar a Stellantis que será el cuarto mayor fabricante de coches en el mundo por detrás de Volkswagen, Toyota y la alianza entre Renault-Nissan y Mitsubishi. La nueva compañía tendrá domicilio social en Holanda y cotizará en la Bolsa de París, Milán y Nueva York. Mantendrá las sedes centrales actuales en Francia, Italia y EE UU y tendrá un mayor equilibrio geográfico ya que el 46% de los ingresos provendrá de Europa y un 43% de Norteamérica.
De Citroën Hispania a Stellantis Vigo
Stellantis será el nombre de la fusión entre PSA y Fiat. Del latín 'stello', significa iluminar con estrellas y las empresas del nuevo grupo tendrán que adaptarse a dicha identidad corporativa y al logotipo como han ido haciendo a lo largo de su historia.
La actual fábrica de PSA Vigo comenzó su actividad en la ciudad en 1958 como Citroën Hispania ensamblando la furgoneta Azu, versión derivada del '2CV'. Fue en 1975 con la llegada de la familia Peugeot cuando nació Grupo PSA Peugeot-Citroën, la primera fusión, que derivó en Groupe PSA en 2016. En 2017 se sumó Opel y Vauxhall (filial de Opel en Reino Unido) tras su compra por parte de PSA a General Motors.
La fusión con Fiat-Chrysler aportará una decena de marcas nuevas y un gigante automovilístico que toca los segmentos de coches de lujo, premium, camionetas, turismos, furgonetas o SUV.
