La Policía trata de averiguar qué es lo que le pasó al joven que en la noche del martes resultó herido grave tras precipitarse desde un muro de unos ocho metros a un patio interior de un inmueble en la calle Ecuador. La versión ofrecida por los testigos contrasta con la que él aportó a los agentes y que hasta ahora no ha servido para esclarecer el extraño suceso.
La alarma surgía sobre las 21 horas en el interior de un edificio del número 88 de la calle Ecuador. Un vecino daba aviso a la Policía porque había un individuo herido en el ascensor. “Estaba en la cocina y escuché unos golpes, como si tiraran algo al patio y después unos gritos”, explica una vecina que reside en el cuarto piso del citado inmueble. Fue entonces cuando la mujer se asomó a la ventana.
El patio de ese inmueble se sitúa en lo que era la entrada del antiguo Cine Ronsel. En uno de las barandillas de un balcón con celosías de un edificio anexo había un joven. “Estaba subido, se agachó y se tiró. Primero se cayó sobre un lateral, pero se levantó y pese a que se tuvo que hacer daño se subió a un muro, incluso llegó a caminar y después se lanzó al patio. Yo creí que era un loco”, relata la testigo. El impacto fue muy fuerte “y vi cómo le quedaron las piernas, pero trató de incorporarse y arrastrándose fue por el patio hasta llegar a un primero”. El residente en ese piso vio al joven que llegaba por el patio, muy excitado. Se asustó y le amenazó con el bastón. El herido sólo quería salir de allí así que finalmente lo hizo por la vivienda. Logró llegar hasta el ascensor, donde quedó inmóvil hasta que llegó la ambulancia.
La Policía cree que trataba de escapar de alguien que había acudido a su pensión en Vázquez Varela y que da al mismo patio, a reclamarle una deuda o similar. En la pensión niegan que subiera alguien a su habitación y la víctima, que iba bajo los efectos de las drogas, dijo que se cayó y no recuerda nada más.