Investigan si las luces de navegación influyeron en el error del pesquero

Pasadas las primeras 24 horas de la mayor tragedia en la Ría de Vigo en 36 años, la colisión del pesquero “Mar de Marín” y el mercante “Baltic Breeze”, la comisión de investigación de Siniestros Marítimos de Fomento comenzó ayer la toma de declaración de los cinco supervivientes del “Mar de Marín”, de forma paralela a la investigación que lleva a cabo la Guardia Civil y que dirige el Juzgado de Instrucción número 7 de Vigo.

Tras escuchar el relato de los miembros de la tripulación del pesquero, que acudieron por la mañana a Capitanía Marítima, estaba previsto que el equipo de Seguridad Marítima llevara a cabo en la tarde de ayer una investigación a bordo del mercante, donde además de la inspección se entrevistaría con los miembros de la tripulación, según  fuentes de la naviera UECC.

La comisión trata de recabar todos los datos para averiguar las causas del siniestro, con el objetivo de que un accidente de tales características no se vuelva a producir, mientras que las posibles responsabilidades penales, en caso de que las haya, se dirimirán en la investigación judicial. 

Las pesquisas se centran en dos aspectos, las luces de navegación y el Sistema Automático de Identificación de Buques (AIS), en el que la Organización Marítima Internacional reconoce la existencia de transmisiones incorrectas. 

Los primeros en prestar declaración ante la Policía Judicial de la Comandancia del Instituto Armado de Vigo fueron el capitán del buque mercante y dos oficiales, que lo hicieron el martes por la tarde. Ellos aseguraron que navegaban por la ruta correcta, algo que también coincide con las declaraciones del armador del pesquero. 

Ayer, declararon los cuatro tripulantes y el biólogo que lograron sobrevivir al extraño y trágico accidente que tuvo lugar de madrugada junto a las Cíes. Primero lo hicieron ante la Guardia Civil y posteriormente ante la comisión de Fomento, en Capitanía Marítima, donde se hizo más extenso el interrogatorio al biólogo, como observador pesquero.

Según la versión de los supervivientes, todos excepto el patrón de costa estarían durmiendo o descansando en los catres cuando les sorprendió  el impacto. Todo habría sido muy rápido, cuestión de minutos. Subieron al puente pero apenas dio tiempo para coger el chaleco y tirarse al mar, para nadar hacia la balsa. Tras tirar varias bengalas, Salvamento Marítimo les recogió en la balsa, al lado había otra vacía. Otros tres tripulantes, entre ellos el capitán de costa fueron recogidos sin vida flotando en el mar por tres pesqueros, con lo que la autopsia  podría descartar el ahogamiento.

Sobre lo que pudo ocurrir para  que el patrón girara hacia el lado incorrecto, se investiga si pudo interpretar mal las luces de navegación del mercante o si hubo un fallo de transmisión en el AIS. El patrón  dio aviso a la torre de control de que había un buque en  su carril,  aunque todo hace indicar que los dos navegaban correctamente.