SUCESO EN VIGO

El millonario alega que su mujer le atacó primero y la Policía lo investiga

Carlos Inacio, junto con su mujer, en una fotografía de las redes sociales.
photo_camera Carlos Inacio, junto con su mujer, en una fotografía de las redes sociales.

El ingeniero portugués investigado por intento de asesinato alegó ante la jueza legítima defensa 

Carlos Inácio Pinto, sobre el que hay un auto de ingreso en prisión por el presunto intento de asesinato de su mujer tras el ataque con una maza de cantero, no sólo negó los hechos en su declaración del viernes ante la titular del juzgado de Violencia sino que alegó legítima defensa. Según pudo conocer este diario de fuentes cercanas al caso, este ingeniero portugués, de 56 años, y que continúa ingresado en el Hospital Álvaro Cunqueiro, donde ingresó tras el incidente por una afección cardíaca,  aseguró que fue su mujer la primera que le atacó y que él solo se defendió, una versión poco verosímil para la titular del juzgado que decretó su ingreso en la prisión de A Lama.

Al igual que habría testificado su mujer, que presenta hasta cuatro heridas en la cabeza compatibles con la maza hallada en la habitación, aseguró desconocer de dónde salió dicha arma y negó haberla trasladado él desde Portugal.

Paralelamente a la instrucción judicial, la Policía de Vigo continúa con la investigación, dispuesta a dilucidar los hechos acontecidos hace ya más de una semana en un céntrico hotel vigués. Fuentes policiales confirmaron que se ha solicitado información a la Policia Judiciaria, con la que se está colaborando, respecto al presunto agresor y también respecto a la víctima, sin que haya trascendido hasta el momento el contenido de dicha información.

Las mismas fuentes aseguraron que hay todavía piezas que no encajan en lo que supuestamente ocurrió aquella mañana en la habitación del hotel, entre ellas las marcas en la espalda que presentaba el hombre, hallado tendido sobre el suelo de la habitación.

En las próximas horas está previsto que la Policía tome declaración al sospechoso, que todavía está a la espera de ser trasladado al centro penitenciario de A Lama y que sigue bajo custodia en el hospital Álvaro Cunqueiro.

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