La incautación del narcosubmarino en la ría de Aldán ha supuesto "un hecho histórico en la lucha contra el narcotráfico", aseguró ayer el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, en la rueda de prensa que ofreció ante el sumergible poco antes de que fuera trasladado a la Escuela Naval de Marín para ser analizado a fondo por los investigadores.
La droga incautada en este narcosubmarino, el primero que se interceptó en Europa, estaba repartida en 152 fardos que ocultaban poco más de 3.000 kilos de cocaína, a falta del pesaje final, cuyo coste en el mercado ilícito sería de 100 millones de euros. El operativo, en el que ya fueron detenidos dos de los tripulantes, sigue abierto y continúa la búsqueda del tercer individuo que iba en el sumergible.
El delegado del Gobierno estuvo acompañado en la comparecencia ante los medios por mandos de la Guardia Civil, Policía Nacional, Vigilancia Aduanera y de fuerzas de seguridad de Portugal, indicando que la investigación "no descarta" ninguna hipótesis sobre cuál fue el recorrido del artefacto. Los fardos fueron extraídos del artilugio en la madrugada del miércoles, después de que dos grandes grúas consiguieran sacarlo del agua y depositarlo sobre un camión-góndola en el muelle de Aldán.
Además del análisis de los fardos de cocaína, será de vital importancia, según explicó Losada, el estudio minucioso del propio sumergible, sus características y todo lo que se localizó en su interior. Así, está previsto que se haga "un análisis forense completo" y todos los datos obtenidos servirán para que los cuerpos policiales y de seguridad dispongan de más información con respecto a este novedoso sistema de transporte de droga, que hasta ahora era utilizado por los clanes colombianos en las rutas hacia Estados Unidos.
Con respecto al origen y destino del alijo, Javier Losada eludió pronunciarse, dado que la operación sigue abierta y está bajo secreto de sumario. Además, el delegado del Gobierno no quiso pronunciarse sobre si el narcosubmarino estaba siendo apoyado por una o más embarcaciones en su travesía, o sobre la nacionalidad del tripulante fugado, sobre el que lo único que precisó fue que "no es ecuatoriano".
