En enero de 2013, en plena reestructuración del mapa financiero español, Pablo Junceda, subdirector general del Banco Sabadell, recibía el encargo de iniciar la expansión del Banco hacia el Noroeste. Tenían 28 oficinas en Galicia y se proponían alcanzar el centenar en diez años.
Apenas tres meses después le caían en las manos de golpe 117 oficinas. El Sabadell había comprado el Banco Gallego y en un trimestre cubría el objetivo previsto para una década. El próximo 15 de marzo, fecha en la que culminará la integración, Pablo Junceda pasará a ser el director general del Banco Sabadell Gallego .
¿Qué peso tiene Ourense en esa estructura del Sabadell Gallego?
Ourense no es la provincia que tiene más peso, a pesar de que hay empresas que nos permiten y nos van a permitir un crecimiento significativo. Actualmente, con 17 oficinas, nuestro peso es el 6,7% de la red bancaria de la provincia. Sin embargo, en negocio no llegamos al 4% y en inversión estamos en torno al 2,4%. Existe una disfunción entre nuestra capacidad instalada de oficinas y el negocio que tenemos y en un banco como el nuestro la cuota de negocio nunca puede ser inferior a la cuota de oficinas. Equilibrar esta situación es nuestro reto para el próximo año.
Esta semana estuvo en la Cámara de Comercio de Ourense para hablar de las perspectivas empresariales para 2014. ¿Cómo ve el horizonte económico gallego?
Hace unos meses comenté que este año íbamos a empezar a ver las primeras señales de mejoría en España. Hoy en día todos hablan ya de un crecimiento incluso superior al 1%. Respecto a Galicia, dije en su momento que la veía en mejor posición que otras comunidades. Creo que hizo los deberes durante la crisis mejor que otras comunidades. La veo fortalecida y sobre todo, veo una clase empresarial muy fuerte, que supo salir al exterior, cuando en otras comunidades seguían mirando al interior. Por eso, mis perspectivas para Galicia son mejores que las que tenemos para España y si siguen así, 2015 será un gran año para la economía gallega. No tengo la menor duda.
Usted insiste una y otra vez que está dispuesto a abrir el grifo del crédito, algo excepcional, ya que la economía sigue lastrada por la falta de financiación.
Abrir el grifo del crédito es fácil si puedes abrirlo, si tienes capacidad y el Grupo Sabadell tiene capacidad sobrada para hacerlo. Otra cosa es que nosotros, que somos un banco muy prudente, vayamos a abrir el grifo sin ton ni son. Hay crédito para quien lo necesite, pero no daremos financiación a proyectos que no se sostengan.
Habrá crédito para las empresa, pero ¿y para las familias?
Exactamente igual, al final hablamos de proyectos y siempre tendemos a hablar de proyectos empresariales, industriales, pero las familias también de alguna manera tienen sus proyectos familiares que son de base económica, comprar piso, coche, una casa de veraneo. No pretendemos crecer sólo con proyectos empresariales.
¿Es caro el crédito en España?
El crédito no es ni caro ni barato. Está en relación con el coste de la financiación bancaria. A veces se dice que el Euribor no llega al 1% y que el crédito tiene que ser más barato, pero no, ese no es el coste de la financiación bancaria. Esta tiene mucha relación con la prima de riesgo del país y España sigue muy lejos de la que tienen los países de nuestro entorno. Luego, también está vinculado al funcionamiento operativo de las entidades. Nadie da duros a tres pesetas y aquella entidad que los dé, a ver cuál es su sostenibilidad.
¿Se estabilizó ya el mapa financiero español, finalizó su reestructuración?
En los últimos cinco años hubo una reestructuración severa del mapa financiero. De 50 bancos que había entonces, quedamos unos 10 u 11. Sobre si finalizó la reestructuración, yo no me aventuraría a decirlo. Lo que sí diría es que los bancos hemos puesto las bases para que futuras crisis no nos afecten con la virulencias que nos ha afectado ésta. Puede que sea necesaria alguna nueva reestructuración, en la medida en que alguna entidad no sea lo prudente que deba serlo. El mercado arrastra siempre a los que no hacen las cosas bien.
¿Por qué cree usted que desaparecieron las cajas gallegas; qué las diferenciaba de las vascas, que sí lograron sobrevivir a la crisis?
Eso quizás había que preguntárselo a los gestores de las cajas vascas y a los gestores de las cajas gallegas
¿Qué siente cuando ve que algunos directivos de las cajas gallegas se sentarán en el banquillo de la Audiencia Nacional?
Yo creo que hay que asumir la responsabilidad de la gestión que se realiza.
De todas formas, la actuación de algunos gestores ha dejado muy tocada la imagen de la banca.
Siempre hubo mejores y peores gestores, pero al final la banca que triunfa y de la que nos enorgullecemos es la impulsora de la economía, de la riqueza, del crecimiento. Esa es una función muy relevante, igual que salvaguardar los ahorros de nuestros clientes, que son algo como sagrado y nos obliga a actuar con una prudencia absoluta. La banca no se aprende de un día para otro. No se puede gestionar entrando un lunes y ese viernes decir ya soy un profesional. La banca es cuestión de muchos años, de mucha paciencia, de mucho aprendizaje y cuando las cosas no se hacen así, pasa lo que pasa.
El Sabadell Gallego es uno de los acreedores de Pescanova. ¿Hay algún avance en la negociación para reflotar la multinacional?
La única novedad es que seguimos tratando por todos los medios y dentro de lo razonable de encontrar una solución con una clave, el mantenimiento de los puestos de trabajo y de una empresa tan importante para Galicia y para España. Haremos todos los esfuerzos que sean necesarios, ahora, lo que no se nos puede pedir son esfuerzos que no tengan sentido y que recaigan solo en una banca que lo que hizo fue financiar de buena fe un proyecto industrial. Está en dificultades y apoyaremos en lo que nos corresponda, pero Pescanova requiere no sólo del esfuerzo de los bancos, sino también de los accionistas, de los gestores, de todos. Aquí todos estamos dispuestos a hacer esfuerzos, pero no los pueden hacer solo los bancos.
¿Cómo se está desarrollando la travesía de la integración del Banco Gallego en el Sabadell?
La ilusión que teníamos de apostar por Galicia paso a paso, en un proceso que nos iba a llevar años, con la compra del Banco Gallego fue como si se cumpliera un deseo de golpe. A partir de ese momento nuestra vocación fue poner en valor lo bueno que tiene el Banco Gallego, muy pegado el terreno, junto a las fortalezas del Sabadell, su capacidad financiera y tecnológica y la fuerza comercial del cuarto banco del país. En este tiempo fuimos acompasando estas dos fortalezas y el día 15 de marzo se completará todo el proceso y estará totalmente operativo el Banco Sabadell Gallego.n
