La progresiva instalación de ascensores, rampas y escaleras mecánicas ayuda a mejorar la comunicación interior y a poder salvar distancias relativamente cortas sin morir en el intento, como ocurre todavía hoy para ir del Berbés al Concello y pasaba entre Beiramar y Camelias. Si Vigo es la ciudad de las cuestas, ¿cuáles son las más duras incluso para los vigueses? Estas 10 merecen con seguridad un espacio aparte.
MANUEL NÚÑEZ
Corta y excesiva hasta para los coches
Su repecho final empinado es un clásico: 17% de desnivel. Muy transitada, ahora es peatonal. Cuando había tráfico, siempre era en sentido descendente. Imposible pensar en un ascenso motorizado.
ALFONSO XIII
Ascenso con la lengua fuera hasta Lepanto
La Subida a la Estación, como se conoce popularmente a esta calle, tiene una pendiente continua, sin repechos, pero que acaba por hacerse dura. En los últimos 25 años ha sido famosa por su gálibo, que acaba de desaparecer con la construcción del nuevo acceso en túnel a la autopista.
POBLADORES
Ascenso terrible desde O Berbés
Una calle cargada de historia, como su nombre indica, en reconocimiento a los primeros habitantes que se asentaron fuera de las murallas, en la expansión del Vigo que ya era ciudad. Caminarla es una proeza, desde O Berbés al Olivo. Casi peatonal, obliga a tomárselo con calma.
VÁZQUEZ VARELA
300 metros eternos hasta el Xeral
Una calle ancha, con mucho tráfico y sólo de subida y con una pendiente muy dura para el peatón, que se hace difícil de manejar en los 300 metros entre Urzaiz y el antiguo Xeral, ahora Cidade da Xustiza.
FERNANDO LAGO OLANO
A descubrir en A Doblada. Brutal
Una calle cuyo nombre no le sonará a la mayoría de los vigueses y que probablemente presenta el mayor desnivel de todas cuantas hay en el centro y además en apenas 50 metros de longitud. Es de subida para los coches, que tienen que ir en primera para evitar problemas. A descubrir en un recorrido por A Doblada y su 17,5% de desnivel.
LAXE
Otra calle breve y que deja sin aire.
Una vía urbana peatonalizada, cargada de historia al levantarse sobre la piedra que da nombre al entorno y donde hubo una batería, con una pendiente dura que sirvió para que los bares del entorno colocaran unas terrazas colgantes singulares que le dieron color y fama durante algún tiempo.
CHILE
Puerto de primera con repechos
Otra calle con mucho movimiento en ambos sentidos, aunque la circulación siempre ha sido descendente. Tiene una entrada complicadísima, que exige una maniobra que se ha llevado por delante en múltiples ocasiones los bolardos, y una curva no menos sinuosa. Varios coches sin frenos se han estampado contra los edificios. Tiene un 14% de desnivel.
RÚA ALTA
Pendiente sin igual
Otra calle histórica, ésta con una cuesta espectacular que obliga a avanzar con precaución para no desfallecer en el tránsito desde la Rúa Real hasta la parte alta del barrio. Una vía estrecha, propia del Vigo marinero, construida sobre la piedra. Hay otras similares en el Casco Vello que parten desde Real, pero ésta se lleva la palma.
SEVERO OCHOA
Beiramar-Torrecedeira, a darlo todo
Una calle casi olvidada, pese a que comunica de forma perpendicular al mar, algo bastante extraño en Vigo, donde la mayoría de las calles son paralelas a la Ría, salvo Coruña y Colón como grandes excepciones de arriba abajo. Severo Ochoa tiene una pendiente final que exige un esfuerzo incluso a los coches, en un vial con doble dirección y salida compleja a Torrecedeira. Todo un reto.
JAPÓN-CHAPELA
La número uno
En Chapela, la número 1 del Gran Vigo. Una subida que puntuaría especial en el Tour desde la parroquia redondelana hacia A Madroa. De auténtico vértigo incluso conduciendo. La más llamativa es la Subida a la Buraca. Toda una experiencia con su 26% de desnivel. Hay otra similar en Sampaio-Vigo, el camino de Subida a Rosal Florido, con otro 26.
