Xunta, BNG y Podemos, unidos contra el pago en las autovías

<p> Tramo de la Autovía Rías Baixas, a su paso por la localidad ourensana de Queirugás. </p>
photo_camera <p> Tramo de la Autovía Rías Baixas, a su paso por la localidad ourensana de Queirugás. </p>

El Ejecutivo gallego reclama consenso con las autonomías a la hora de tomar estas medidas

La Xunta manifestó sus dudas sobre el anuncio de la intención del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para empezar a cobrar por el uso de las autovías a partir del año 2024, ya que considera que, antes de avanzar en la tramitación del sistema, debe concretarse por qué modelo se apuesta. Así lo trasladó el director xeral de Mobilidade, Ignacio Maestro, que representó al Gobierno gallego en la Conferencia Nacional de Transportes, donde reclamó que el modelo para la implantación del pago por autovías se consensúe con el sector y las comunidades autómas.

Con el foco puesto en el “diálogo” y la “transparencia”, el responsable del Ejecutivo gallego apeló a que la implantación de peajes en autovías “tenga en cuenta su impacto” en los territorios periféricos y en el sector del transporte. Por lo tanto, según informó la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, que dirige Ethel Vázquez, la Xunta ha solicitado la convocatoria de una conferencia sectorial “centrada exclusivamente” en la implantación del cobro por uso de las autovías.

 

VISIÓN DEL BNG

El BNG rechazó ayer en el Congreso la posible extensión de los peajes en las autopistas y señaló que, sin alternativas de movilidad previas, se trata de una medida “antisocial” y “una nueva estafa”. “Los ricos siempre podrán pagar las autovías. Los peajes van a gravar las clases populares e implicar un sobrecosto para las empresas gallegas que continuarían perdiendo competitividad”, criticó su diputado en la Cámara Baja, Néstor Rego.

Todo ello tras avanzar el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de Raquel Sánchez su intención de poner en marcha, como máximo en 2024, un sistema generalizado de peajes, al que ya renunció su predecesor, José Luis Ábalos. Sin embargo, la medida ni siquiera está consensuada dentro del Gobierno de coalición, ya que Unidas Podemos rechazó esta posibilidad, encuadrándola como un “globo sonda” de los socialistas, y advirtiendo de que no aceptará esta medida si supone un coste para la clase media y trabajadora.

Para el BNG, la introducción de este sistema de “pago por uso” con el fin de contribuir a su sostenimiento “supondría una deriva hacia el neoliberalismo extremo con consecuencias desastrosas para las mayorías sociales y los sectores más vulnerables”, tal y como puntualizó Rego.

Tampoco comparte la formación nacionalista los argumentos de carácter medioambiental, para desincentivar el uso del vehículo privado, pues cree que no es posible desincentivar este uso si no hay alternativas adecuadas de transporte público para cubrir las necesidades diarias de la población así como  de las empresas.

Te puede interesar