24 de enero de 1921
24 de enero de 1946
24 de enero de 1971
24 de enero de 1996
24 de enero de 1921-Extraño crimen en el Barco de Valdeorras
El cadáver de un vecino de Villanueva (Barco de Valdeorras) aparece en Gulpellás con una herida de bala en una pierna y 200 pesetas y un reloj de plata en los bolsillos, encontrándose una pistola cargada con seis balas. Tres individuos, vecinos de Villanueva y Vegadecoba, fueron detenidos por su presunta implicación.
-Donantes con 5 pesetas en el Gobierno Civil de Orense para al aguinaldo del soldado: Rita Cabal de García, Elena Ramos de Maté, Hermelinda Peláez, viuda de Romero, Purificación Santiago de Sáa, Alejandrina Sáa de Villarino, Felisa Nieto de Romero, Gracia Conde de Cerredelo, Eugenia Elices de Álvarez, Octavia Guerra de Osorio, Concepción Gómez, viuda de Tejada, Emilia Torres de Nieto, Teresa Becerra de Romero, Sixtalina Puga, viuda de Sáa, José Romero Romero, Celso Romero Peláez, Domingo Romero, teniente de Carabineros, Rodolfo Vidal, J. Recaredo Morenza, Antonio González, Gerónimo Peláez, Josefa Romero, Francisco González, Fausto Peláez, Juan R. Lepina, Efrén Álvarez, Maximiliano Diego, Empleados de la Molinera Antelana, Modesto Álvarez Elices y Ángel García.
24 de enero de 1946-Nuevos títulos de familia numerosa
Nacieron en Orense: Ricardo Lorenzo García y Paz Bertólez Cue.
-Títulos de familia numerosa: José Cid Lorenzo, Juventino Crespo Martínez, Serafín Fernández Gómez, Antonio Francisco Valeiras, Antonio García Rodríguez, Antonio González Iglesias, Hilario León Sola, Rudesindo López Iglesias, Ramón Losada Losada, Óscar Montero Moreno, Toribio Moreiras Blanco, Rafael Muñiz Casademunt, Vicente Novoa Limeses, Diógenes Parra Rodríguez, Delmiro Pérez Bargados, José Pérez Sotelo, Bernardino Rivero Lorenzo, Ramón Rodríguez Fernández, José Albitos Fraguas, Rosalía Araujo Álvarez, Antonio Ávila Domínguez, Fernando Barbosa Rodríguez, Segismundo Bobillo Medina, Ana Bonet Peñalver, José Cabo Álvarez, Manuel Camba Veleiro, Salvador Crespo Fernández, Arturo Estévez Yáñez, Dolores Fábrega Guitián, Heliodoro Feijóo Costela, Luis Fernández España, Avelino Fernández Gil, José Fernández Pérez y Antonio Fernández Prieto.
-(1) Jesús Taboada manifiesta, en un artículo en La Región, su contrariedad por la prohibición de la presencia del cigarrón en la romería de San Antón, en Verín.
24 de enero de 1971-Los intentos de la CIA para matar a Fidel Castro
Durante el pasado mes de diciembre nacieron en O Irixo: Manuel Barbosa Nogueira, Manuel Penedo López. Se casaron: José Crespo Amaro y Carmen Filgueira Munín, Manuel Pérez Pérez y Leonor Pérez Dobarro, Luis López López y Celia Bugallo Covela, Francisco Rue Tost y Generosa Rivas Pérez.
-Las autoridades desmienten la existencia de una epidemia de meningitis en la provincia de Orense, ante la aparición de varios casos e incluso el fallecimiento de un niño por este enfermedad en la capital.
-El periodista estadounidense Jack Anderson desvela en el diario Excelsior de México la existencia de hasta seis intentos de asesinar a Fidel Castro por parte de la CIA, dos de ellos envenenando su comida (uno de ellos casi tiene éxito al caer Castro gravemente enfermo) y otros cuatro enviando grupos de tiradores cubanos, ninguno de los cuales llegó a hacer ningún disparo contra el dirigente aunque uno de los grupos llegó a tenerle a tiro desde una azotea antes de ser detenidos.
-La ciudad de Belfast es escenario de nuevos disturbios, en esta ocasión protagonizados por mujeres y niños del barrio católico de Ballymurphy que se “enfrentaron” a las tropas británicas empleando palos, botellas, tapas de cubos de basura y otras “armas” parecidas a su alcance.
24 de enero de 1996-El rally de Ourense, el segundo mejor de España
El Rally de Ourense se consolida entre las mejores pruebas de España según la puntuación otorgada por la Federación Española de Automovilismo, que sitúa a la clásica ourensana como la segunda mejor del país solo superada por el Rally de España-Cataluña, valedera para el Mundial de Rallies y considerada además como la mejor del calendario internacional. “Un reconocimiento a un trabajo bien hecho” en palabras del presidente de la Escudería Orense, Antonio Colemán, que recordó a los cerca de 600 colaboradores con los que contó en la última edición como los verdaderos artífices del éxito pese al exiguo presupuesto del Rally, en torno a los 25 millones de pesetas y muy lejos de otras pruebas similares en España que cuentan con cifras hasta cuatro veces superiores.
-Nacieron en Ourense: Josefa Méndez, Miguel López Páramo, Sabela García Benito, Jesús Valverde Sala, Eva Neira Vázquez, Andrea Miranda Álvarez, Borja González Cudeiro, Eva Iglesias Hermida.
(1) Erguida sobre el altozano, la ermita se envuelve en colores desvaídos a la luz helada del sol invernal. San Antón congrega anualmente una romería jubilosa que reza y baila, ofrenda sagrada y profana al santo milagroso. El humo de las hogueras calienta el ambiente como en un rito de purificaciones lustrales. Olor acre de grasa chorreante que ahíta el estómago.
A la puerta del santuario el sacristán dirige la puja de cachuchas, lacones y pies de cerdo. El frío hace ínitma y cordial, como reunión hogareña, a esta fiesta campesina. Campesina como ninguna, porque el santo, patrón de la "facenda", humaniza, en su protección al ganado, la pura animalidad que en el campo vive y sufre como el hombre.
Pero algo falta a esta fiesta que sigue teniendo, sin duda, belleza y alegría, pero alegría silenciosa y urbana con música de chotis, valses y habaneras. Ha perdido su más típico sabor con la ausencia melancólica del cigarrón. Él solo llenaba la fiesta de estruendo jocundo y de arcaicas evocaciones.
Sobre el estrato arqueológico de casi veinte siglos, en que se alza la ermita, el cigarrón era como una figura de antaño que perduraba a través de las mutaciones seculares; adalid y guardián de la leyenda que triunfa del tiempo. Porque, en definitiva, etnografía y folklores son arcos tendidos entre el ayer y el hoy para dar vigencia y continuidad a la historia.
Faltan los clamores asustadizos de los niños ante la máscara hórrida; faltan las protestas pudibundas de las hembras protegiendo la falda del "zarrapo" libertino; faltan los gritos desafiadores de los mozos incitando a la carrera, y la algarabía de las "chocas" y las caídas y los sustos y las carcajadas estentóreas.
Ha desaparecido el cigarrón de perfil y atuendo prehistórico, con su profundo sentido mágico y ritual, enlazado a prácticas totémicas y religiosas, aunque el pueblo inerudito gustó más de componer su historia con ingredientes de crítica mordaz a lo flabiau, dirigida contra el poder feudal de Monterrey, que enviaba a estos hombres con cencerros anunciadores y zurriagos conminatorios, a cobrar prechos y tributos.
La prohibición de las máscaras ha terminado con ésta de tanto sabor y de tan hondas raíces. Y las gentes se entregan a añoranzas y nostalgias del cigarrón que revive en estos días en la mente de todos.
La tarde se reclina en el regazo helado de la noche. El sol se agazapa entre nubes grisáceas de nieve, mientras al fondo Verín ofrece el anacronismo crepuscular de sus tejados. Los senderos se cubren de un hormiguero humano sin el rumor milenario de las "chocas". Sobre el alcor parece que la sombra del cigarrón, como la de Hamlet, tiene el ceño vindicatorio de la leyenda que se resiste a morir.
(Jesús Taboada. 1946)
