Hace ya muchos años que Galicia cuenta con una cadena de tiendas de comida para llevar a casa y que quien esto escribe ha utilizado no pocas veces, sobre todo, en tiempos en los que el trabajo no te dejaba llegar con tiempo suficiente para ponerte a cocinar o, simplemente, porque no te apetecía. Aunque reconozco que los platos que más he disfrutado fueron en el tren, regresando de Ourense a Vigo, cuando todavía había un tren a mediodía que cubría ese trayecto. Era como convertir un modesto tren regional con más de 40 años de rodaje en un coche restaurante, con vistas al Miño.
Coren Grill es uno de los mejores inventos de este grupo agroalimentario ourensano, porque además te permite disfrutar de buena parte de sus productos, buena parte de ellos cuentan con el sello de Galicia Calidade, sin tener que cocinarlos. Y aunque su repertorio es verdaderamente amplio, que incluye entradas a base de embutidos y jamón al corte, ensaladas y salpicones, o platos más contundentes como unos callos o un codillo de cerdo al horno, o un lacón con grelos, y las clásicas elaboraciones a base de pollo (la lista, insisto es muy grande) y postres para poder completar un variado menú, yo quiero subrayar hoy su costilla de cerdo selecta criado con castañas. Ahora que parece que vamos a tardar todavía tiempo en ir a comer un churrasco a algún merendero o asador, tenemos ocasión de disfrutarlo en casa, asado en su punto.
He aquí un trabajo bien hecho. Sin grandes alardes pero con mucha dedicación, que permite que una empresa gallega, porque ya es mucho más que ourensana, complete el ciclo de producción, desde las granjas hasta el plato del comensal.
