Regalar una planta puede tener una gran cantidad de significados, pudiendo atraer diferentes beneficios, como fortuna, salud o incluso buenas noticias, elegir correctamente cuál depende de lo que se crea más acertado para la persona que la recibirá
Este sábado es Fin de Año y los hogares españoles lo pasarán en casa viendo las campanadas y tomando las uvas con los cuartos. Esta tradición, que data al menos de 1895, es la forma que tenemos de entrar en el nuevo año con fortuna, buscando un poco de suerte para que cada año sea mejor que el anterior. Según una teoría, esta práctica la popularizaron unos viticultores alicantinos que buscaban vender una gran cantidad de uvas hacia finales de año antes de que la cosecha se echase a perder.
Como esta tradición, existen muchas otras formas de buscar la fortuna para comenzar el año de la mejor manera posible. Regalar y recibir algunas flores es una forma de aportar esta suerte que tanto se necesita en los tiempos que corren. Al igual que la tradición de las doce uvas, hay plantas que están asociadas con la suerte, pero además, hay muchas otras plantas que se regalan en fin de año que se vinculan a diferentes predicciones basadas en antiguas supersticiones.
El lenguaje de las flores o floriografía es un método de comunicación que se basa en los colores y las especies. Mediante este método, las personas que sean conocedoras de la floriografía pueden entender un regalo floral y asociarlo a un sentimiento. Por ejemplo, una persona desconocedora de este método puede no relacionar su significado, pero una persona que sí que lo sea, asociará recibir una camelia con un sentimiento de orgullo o admiración. En algunos países esta asociación se encuentra muy arraigada, en Japón por ejemplo, es más común que las flores guarden significados concretos.
Flores de Fin de Año
El árbol de jade, conocido también como planta del dinero, es una planta muy conocida que se regala como deseo de fortuna económica a la persona que reciba el regalo. A pesar de que es una especie que se regala a lo largo de todo el año, es un regalo muy presente en fin de año, para desear una buena entrada en el año nuevo. Además de su bella tonalidad verde brillante, florece con unas flores blancas muy vistosas que forman una mata que recubre la planta. Para que florezca, esta planta debe tener aproximadamente una edad de 10 años y cuando se encuentre en período de madurez reproductiva, las condiciones no pueden ser demasiado húmedas, en caso contrario, no florecerá.
Los crisantemos, esa especie tan abundante el día de los muertos, también tiene un emotivo significado al ser regalado. En floriografía, se cree que esta planta atrae el éxito, el amor y que impulsa a alcanzar objetivos, algo perfecto en fin de año para ayudar a cumplir los objetivos propuestos para afrontar durante este 2023. En torno a esta flor existe también una creencia que dicta que si introducimos unos pocos pétalos en una copa de vino y bebemos de ella ayudará a vivir una vida larga y saludable.
Si lo que buscas es atraer el bienestar y equilibrar las energías la lavanda es tu flor. Se cree que esta especie ayuda a alejar la tristeza y a ahuyentar las malas energías. Si conoces a alguien que esté atravesando un mal momento, regalar esta flor y explicarle su significado puede que funcione, o al menos puede que le arranque una sonrisa.
A diferencia de las anteriores especies nombradas, el lirio está marcado por un código cromático que determinará lo que atraiga. Esto quiere decir que su función variará dependiendo el color que elijamos. Los lirios azules, por ejemplo, se cree que atraen buenas noticias, mientras que los blancos atraen esperanza. De forma general, esta especie atrae también suerte y pureza.
Si has sido invitado a una cena de fin de año y no sabes qué llevar, pero quieres ser más original que llevar una botella de vino, alguna de estas plantas puede ser una gran opción.
Consultorio
Beatriz Fernández, Ourense: ¿Debo podar esta planta? ¿Cuándo? Ahora está perdiendo las hojas, que caen y amarillean…
El jazmín es una planta de hoja perenne, llegando a aguantar temperaturas de entre -7 y hasta -12 grados. Sin embargo, es común que ante las temperaturas frías pueda perder alguna hoja más joven. El estado en el que se encuentra no parece que sea nada grave, pero si se deberá vigilar antes de que pueda empeorar, en ese caso, se deberá revisar con precaución que no tenga ninguna plaga, ya que esta especie tiende a ser infectada por la araña roja.
En cuanto a la poda, todavía no parece que sea especialmente grande, pero si quieres orientarla para que crezca de manera vertical, puedes podarla a finales de invierno, para que pueda recuperar los brotes con temperaturas cálidas. Para ello, rebaja las ramificaciones laterales. Si haces esto año a año, crecerá de manera vertical sin llegar a explayarse de manera horizontal, en caso contrario, no alcanzará tanta altura y asemejará más una especie arbustiva.
