El frío triplica las lesiones musculares

El deporte amateur no pasa por buenos momentos. Si el 2020 se convirtió en el paraíso del entrenamiento indoor e individual, el presente año no parece llevar un camino mejor, al menos en lo que a práctica deportiva se trata. Todos estos cambios, contratiempos y confinamientos han provocado un cambio en los hábitos y en la calidad de los entrenamientos, lo que causa distintos problemas añadidos. Además, si a ello se le suma lo complejo del clima, con una bajada extrema de las temperaturas, las lesiones musculares hacen acto de presencia en niveles superiores a lo habitual. El traumatólogo deportivo Adrián Gallego Goyanes afirma que esto es debido a que "nuestro cuerpo prioriza mantener los órganos internos a mayor temperatura, provocando una disminución de la vascularización muscular y por lo tanto mayor facilidad para las lesiones". Gallego destaca que "en nuestra consulta hemos detectado un aumento de lesiones musculares el triple de lo normal, generalmente producto de un calentamiento insuficiente". En este sentido, el traumatólogo deportivo ofrece unos consejos sencillos para evitar que la visita a la consulta sea obligatoria en el corto plazo. "Es necesario aumentar el tiempo de calentamiento previo a la actividad y ser conscientes de que la activación previa en el domicilio es importante. La utilización de cremas de calor y masajes previos a comenzar a hacer ejercicio pueden prevenir algunas lesiones y aunque parezca mentira, salir muy abrigado para mantener la temperatura corporal nos librará de las lesiones", afirma el especialista en traumatología deportiva. Y aunque lo que más se tratan son roturas fibrilares, también se ha producido un aumento de los dolores por contracturas y temas relacionados con artrosis. "El frío y la lluvia son enemigos de este tipo de dolencias. Aplicar calor en la zona dolorida mejorará notablemente la patología". Eso sí, mucha gente considera que es por la humedad, pero el doctor Gallego matiza. "Es una cuestión relacionada con los cambios de presión detectados por las articulaciones provocando el aumento de dolor en casos de procesos degenerativos", añade. Por eso, el doctor Gallego insiste en la importancia de mantener el cuerpo a la temperatura adecuada y evitar la exposición prolongada al frío, puesto que el cuerpo humano tiende a la protección de elementos vitales y con ello llegarán las incómodas lesiones. En conclusión, la prevención es la mejor herramienta para evitar contracturas, roturas y otros dolores.