Baloncesto

Objetivo, formar nuevos adultos

OURENSE 24/10/2019.-  Escuela de baloncesto en Carmelitas. José Paz
El Carmelitas trabaja desde hace 23 años en el refuerzo de valores y capacidades para el mundo real

Casi un cuarto de siglo de vida y mucho deporte para formar a los adultos del futuro. El Club Carmelitas Vedruna, a través de su infinidad de disciplinas deportivas y con el baloncesto como punta de lanza, trabaja cada día para que sus deportistas sean mejores, tanto a nivel de resultados deportivos como sobre todo en el aspecto educacional.

De la mano en este proyecto, la entidad ourensana está enrolada en el Programa Abanca de Deporte Base, que aúna todas las cualidades que busca el banco gallego, deporte y formación. 

Suso Garrido, coordinador del Club Carmelitas Vedruna, entidad que desde hace 23 temporadas compite en las distintas categorías provinciales y autonómicas, afirma que "nuestro objetivo, por encima de cualquier resultado deportivo, es formar a los adultos del mañana. Evidentemente, siempre buscamos un término medio, en el que el crecimiento deportivo vaya de la mano de una educación. Tenemos detrás a un centro escolar y eso nos hace querer ser mejores en ambos sentidos".

Consciente de la importancia del apoyo que muestra la entidad bancaria al club, Garrido remarca que "es importante el apoyo que recibimos. Tenemos ideas muy similares sobre lo que buscamos con el deporte y eso nos hace trabajar con mayor seguridad y convicción".

Ese ideario se basa en el trabajo, el sacrificio y el esfuerzo para alcanzar las metas marcadas, evidentemente no solo dentro del terreno de juego. "En Carmelitas creemos que a través del deporte los niños pueden adquirir valores para el día de mañana. Queremos que sean mejores personas en el día a día y eso viene a través de ello".

Y como muestra, los resultados deportivos, que sin ser la prioridad también son importantes. "No buscamos ser los mejores en ninguna de las competiciones en las que participamos. Sabemos que esto depende mucho de las generaciones de jugadores que tenemos y a partir de ahí intentamos mejorar a nivel grupal para conseguir pequeños objetivos. Evidentemente si podemos ganar, pues mejor, pero no es una obsesión".

Carmelitas Vedruna es pues un club con la formación como línea de trabajo.

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