La temporada más difícil para el CVO

El coronavirus se está encargando de convertir la 2020-2021 en la temporada más difícil para los clubes y equipos ourensanos. En el caso del Club Voleibol Ourense esa dificultad adquiere un matiz todavía más exigente, puesto que el CVO puede considerarse un club de base. Su equipo de referencia es el sénior de la Primera Nacional Femenina, pero todo lo demás es cantera. "Esta situación sanitaria genera miedo en los padres y yo que también soy padre lo veo lógico. En todo caso, estamos tratando de mimar a los equipos lo máximo para que, en la medida de lo posible se sientan cómodos en los entrenamientos y cuando lleguen los partidos", subraya Pablo Pérez, presidente de la entidad y entrenador del primer equipo. La presencia del Aceites Abril en la Primera Nacional le permite al CVO estar incluido en el "Plan de Patrocinio de Equipos de Alto Nivel de Galicia", programa de apoyo al deporte autonómico que patrocina Abanca a través de la Fundación Deporte Galego. "Es la segunda temporada que estamos en el plan y para nuestro club ese apoyo se convierte en algo fundamental. Tanto, que nuestra sin él nuestra presencia en la élite sería inviable, sobre todo en una situación tan difícil como la actual, en la que la aportación de muchas empresas es menor". Y añade. "Este apoyo nos permite poner en valor a la gente que está trabajando con la base". Hablando de cantera, la escuela del CVO se verá este curso un tanto mermada en número de efectivos, porque el covid-19 está alterando todo. "Hemos notado una bajada en el número de jóvenes, pero es normal, sobre todo al principio. Cierto es que el voleibol no es un deporte de excesivo riesgo en la propagación del virus, porque no conlleva un contacto estrecho y por ello cada semana crece el número de jóvenes que llegan al club. Esperemos que los datos de la pandemia vayan mejorando y así se sigan animando para empezar a jugar. Desde el club lo que estamos haciendo es tomarnos muy en serio lo de los protocolos de seguridad. Es primordial minimizar los riesgos y, de ser posible, que nadir se contagie por la práctica directa del voleibol. Es más, aunque no era obligatorio recomendé jugar al primer equipo con mascarilla y aunque puede suponer una merma en el rendimiento queremos poner todos los medios para evitar riesgos". Mirando al futuro El CVO tenía previsto poner en marcha esta temporada un ambicioso proyecto de promoción del voleibol en centros escolares, aunque el covid "nos obliga a posponerlo. La idea era ganar volumen de nuevos practicantes gracias a llevar nuestra actividad de forma gratuita a los colegios. Ahora seguimos realizando la promoción por las redes sociales", finaliza Pablo Pérez. Por el momento, al CVO le toca seguir trabajando en estas condiciones. Por falta de esfuerzo no va a quedar.