El Cidade de As Burgas de fútbol 8 benjamín organizado por el Pabellón volvió a dejar claro que hay base gracias a un buen número de partidos entre las mejores canteras
Semana Santa es una época propicia para que se disputen torneos donde los más pequeños sean los protagonistas. Y uno de los clásicos en el menú deportivo ourensano tiene como epicentro el campo Miguel Ángel-Os Remedios. La edición número 11 del Torneo Cidade de As Burgas de fútbol 8 benjamín volvió a ser un éxito de participación y de calidad.
Los más pequeños volvieron a demostrar su talento sobre el remodelado césped y brindaron partidos muy intensos a los espectadores que, en gran número, se dieron cita en las gradas del recinto.
Doce equipos distribuidos en cuatro grupos de tres escuadras lucharon por un título que terminó en las vitrinas del Verín.
Pero antes, todo comenzó a las 10:00 horas con el partido que daba el pistoletazo de salida al torneo, el que enfrentó a los anfitriones del Pabellón con el Arrabaldo. Los franjiverdes no fallaron y vencieron por 6-0. A partir de ahí, mañana intensa para decidir los cuartos de final. Y de ese primer cruce salieron los semifinalistas.
En la primera, duelo entre hermanos. El Pabellón logró superar con apuros al Pabellón Promesas (3-2). Por el otro lado del cuadro, el Verín hizo lo propio con el Lalín (0-2). La final estaba servida.
Entrada la tarde, broche de oro para cerrar el torneo. Los verinenses empezaron fuertes y tomaron ventaja. El Pabellón reaccionó e igualó. Un toma y daca que llevó a que la final terminase con empate a tres.
Los penaltis dictarían sentencia. Y ahí el Verín fue mejor para conseguir proclamarse campeón de un torneo que volvió a dejar un gran sabor de boca a participantes y público.
