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El Ximnasia Pavillón, a toda máquina
En pleno inicio de la temporada de gimnasia rítmica. Así pilló al Ximnasia Pavillón y al Escola Pavillón la crisis del coronavirus. Frenazo en seco a una campaña que había comenzado de la mejor forma: tres conjuntos clasificados para la Copa de España, que debería disputarse en Pamplona el 2 y 3 de mayo. Todo paralizado.
A expensas de saber cuándo se podrá retomar la actividad, las entidades pabellonistas tratan por un lado hacer más llevadero el confinamiento a sus gimnastas por medio de retos, juegos y actividades conjuntas con la familia, y por otro mantener, dentro de las posibilidades, la formación y el estado físico mediante entrenamientos por las redes para ganar tiempo si el COVID-19 permite recuperar algo del curso.
Desde la directiva del club pabellonista, Pilar Iglesias reconoce que “esta situación para nós supuxo un mazazo, porque en marzo-abril comezaba o forte dos campionatos, e como é lóxico, estáse a suspender todo o máis próximo. Por exemplo, a Copa Deputación, que é en maio, non creo que se faga, porque tampouco chegaría a xente preparada; tamén está no aire a Cascais Beach Cup de Trampolín, no que xa tiñamos feita as inscricións. O que si estou convencida é que a Copa, o Campionato de España de Trampolín ou o Nacional de Rítmica se desenvolverán, aínda que en setembro, outubro..., cando se poida. Tocará pois, replantexar as tempadas”.
Iglesias agradece el esfuerzo del equipo técnico del club, “que se está matando para seguir coa actividade . En rítmica, que xa estaban montados os equipos, as adestradoras explican por videoconferencia os diferentes elementos dos exercicios, visualizan a súa execución para correxir cousas, pero ademáis tamén propoñen retos, xogos nos que se involucran tamén aos familiares... Hai que botarlle imaxinación, porque máis alá do aspecto físico e deportivo está tamén o aspecto emocional”.
EL EQUIPO TÉCNICO
La entrenadora de rítmica Natalia Gómez lamenta que esta crisis pueda suponer que “toda la temporada se vaya al garete. No sé qué pasará con la competición del verano y el invierno, pero la primavera es la más fuerte para nosotras. La temporada autonómica parece perdida, y para muchas gimnastas esa es su competición más importante. Algo más de suerte pueden tener las de competición nacional”.
La entrenadora destaca los esfuerzos que están realizando “para mantener la forma de las gimnastas. Dentro de las dificultades que supone hacer esto en casa, porque no puedes realizar elementos como lanzar ni practicar intercambios, con las niñas de competición nacional realizamos entrenos en los que realizamos seguimiento por videollamada y que incluso nos permite practicar con la música. A las niñas de nivel escolar y promoción proponemos retos y actividades para realizar con la familia”.
En este sentido, destaca “la extraordinaria colaboración de las familias controlando los entrenos que enviamos a las gimnastas, ayudando en su realización, preparando el salón o la habitación para generar el espacio... Les devolvemos los agradecimientos que nos trasladan por la preocupación y el trabajo que estamos realizando para mantener la actividad”.
Natalia finaliza enviando un mensaje de “ánimo” hacia “las mayores, aquellas para las que esta puede ser la última temporada”. Toca pues esperar. A ello andan el Ximnasia y el Escola Pavillón.
