Esta edición del Rías Baixas será recordada por los muchos accidentes y el abandono de buena parte de los favoritos
Contra todo pronóstico Manuel Fernández y Alejandro Cid, sobre un Renault Clio N5, se alzaron ayer sábado con la victoria en un accidentado Rally Recalvi Rías Baixas, en donde el piloto local se montaba por vez primera en este vehículo y conseguía superar en tan solo seis segundos a los segundos clasificados, Jorge Pérez y Juan Gándara, con un Renault Clio R3, completando el pódium los hermanos Celestino y Jorge Iglesias, con un Ford Fiesta N5, a 46 segundos de los ganadores.
Sin sacar merito a los vencedores, todo lo contrario, tal vez este rally sea recordado por lo abandonos de los favoritos, tal y como le sucedió a Senra por conato de incendio en su Ford Fiesta R5, por salida de carretera de Meira y su Mitsubishi Lancer, sin grandes daños, todo lo contrario a lo acontecido a David González en el estreno del Ford Fiesta R5, cuyo copiloto, Gustavo Piris, sufrió la rotura de un brazo y daños en varias costillas, con un vehículo muy dañado, mientras que a Iago Caamaño se le soltaba en pleno tramo un rueda y perdía más de seis minutos, finalizando la prueba en la décimo segunda posición.
Por todo ello, el rally sufrió varias neutralizaciones y varios retrasos.
