Cientos de lugareños estuvieron acompañados por otros tantos llegados desde la villa de Verín en tres autobuses
Si hay una localidad que anuncia a bombo y platillo que arrancan cinco días de locura "enxebre" y colectiva esa es la de Laza. Ayer noche, desde las doce de la noche, se inició el último de los "folións", el grande de todos ellos.
Cientos de residentes y foráneos se dieron cita en el Fondo da Cerdeiriña, para comenzar un recorrido por A Cerdeiriña, A Rúa, Souteliño, Barrio y O Solado.
No dejaron de sonar sus estruendosos bombos, acompañados también de cualquier utensilio capaz de proporcionar estridentes sonidos. Antes, la tarde sirvió para acumular energía con licores, xastré y seguro que mucha bica de la localidad.
Fue uno de los más concurridos, porque todos aquellos compadres verinenses que remataron el recorrido en la villa tenían además la posibilidad de continuar la celebración en la vecina Laza.
La organización dispuso de un servicio de autobuses desde la estación verinense con salidas a las 20,00, 21,00 y 23 horas. Tendrían la oportunidad de regresar a las cuatro y a las seis de la madrugada de hoy sábado. Así que no hubo excusas para no participar.