Los tres encapuchados que en la madrugada del pasado día 27 arrancaron con un camión el cajero automático del único banco de Vilardevós, abandonaron el vehículo en una finca con abundante maleza en la margen de la carretera que enlaza Vilardeciervos (Vilardevós) y Cabreiroá (Verín).
Los agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil lo encontraron oculto entre mimosas y arbustos, a unos dos kilómetros de la localidad verinense. Los delincuentes, antes de abandonar el camión, que había sido robado a un repartidor de leña, le plantaron fuego.
Sobre la carrocería continuaban los tensores con los que arrastraron el cajero automático, que no lograron abrir (lo abandonaron en la carretera) para apoderarse de los 17.000 euros que había en el interior. La Guardia Civil revisó con lupa el camión a la búsqueda de huellas de los tres delincuentes.