“Sen solución, que non veña"

Entón, ¿xa hai pediatras?" La principal curiosidad de los vecinos que acudieron al "peche" a las puertas de la Gerencia del Hospital de Verín se repitió durante la mañana de este jueves casi como un mantra. 

Trabajadores, facultativos y vecinos de la villa encaraban ayer la jornada 39 de encierro. Alguna de las manifestantes tenía, incluso, que contar de memoria los días que habían transcurrido desde aquel 2 de diciembre de 2019 a las 08,00 horas. Una mañana en la que sonó con más fuerza que nunca el ya famoso lema "Verín non se pecha" y que ya ha recorrido, durante más de un mes, calles, discursos políticos, redes sociales e informativos de toda España.

Dos partos de urgencia, una dimisión, varios traslados de embarazadas y unas Navidades después, los ánimos no han decaído en absoluto en el encierro verinés en donde el árbol de Navidad dejaba ayer un hueco disponible para las llamas de una hoguera -de plástico, eso sí-.  

Otro de los "ruxe ruxe" de los pasillos tenía que ver con la llegada de una vieja conocida, Guillermina Agulla, quien ocupará el lugar dejado por Miguel Abad al frente de la Gerencia. Alguno de los "pechados" la había visto por última vez en la cena de conmemoración del 25 aniversario del Hospital y se sorprendía de su reincorporación, pues la facultativa había dejado el centro hace casi tres años. 

Es este uno de los motivos que ha contribuido a que los vecinos de Verín tengan sus esperanzas más vivas que nunca, y es que tienen la certeza de que Agulla vuelve para solucionar, entre otros, el problema del paritorio. 

Sin embargo, la gerente tendrá que trabajar duro y lidiar con los más escépticos: "Se non trae unha solución, que non veña", se escuchó ayer entre los concentrados. Desde la comisión delegada del centro son más optimistas: "Non podemos facer valoracións ata que a nova xerente faga declaracións. Evidentemente se chega dicindo que o paritorio non se pode abrir porque non hai pediatras, pois mal imos", manifestó la portavoz de los trabajadores, Eva Fernández. "Quero ser positiva. Eu sempre pensei que a medida adoptada non era a máis adecuada e quero crer que Guillermina vai a solucionar esto, se non, penso que non viría, porque se trata dun conflito aberto. 24 horas máis tarde da súa chegada poderemos facer valoracións", añade. 

Fernández explicó que en el hospital se vive un ambiente de incertidumbre. "Estamos igual que nos Reis Magos. Esperando que hoxe cheguen e que realmente traian algo bo, porque se traen carbón, dende logo, non nos imos a mover de aquí. Acabo de falar cunhas 20 persoas que están ás portas do hospital e o teñen clarísimo", añadió la trabajadora.

Las cifras: