Daniel D.O.C., de 37 años, reconoció ayer en la sala de vistas de la Audiencia de Ourense que en diciembre de 2018 traficaba con droga al menudeo en Verín. La venta de la cocaína y el hachís que compraba en Ourense le ayudaba a sufragar su adicción. En la sala de vistas, se formalizó el acuerdo previo entre el fiscal y su letrada, reconociendo el delito que le imputaba la acusación pública, tráfico de drogas. La pena bajó de los cinco años inicialmente pedidos a los dos al reconocer la grave adicción que padecía. "Al realizar estos hechos, el acusado tenía afectada su capacidad debido a la dependencia de sustancias tóxicas".
La detención que le sentó en el banquillo en la mañana de ayer ocurrió el 28 de diciembre de 2018 tras acudir a la ciudad para aprovisionarse de cara a la fiesta de Fina de Año. Le dieron el alto cuando abandonaba la autovía A-52 en la localidad de Vilaza (Monterrei). Los agentes, tras cachearlo, le encontraron 31,47 gramos de cocaína y 0,2 gramos de hachís. También llevaba consigo 481 en billetes y monedas que procedían de la venta de sustancias estupefacientes.
La juez autorizó la entrada y registro en su vivienda de la calle Touza un día después. En la casa aparecieron útiles que acreditaban el tráfico de drogas: una báscula, sustancias para el corte, una bolsa transparente con 15,4 gramos de hachís, otra bolsa con marihuana, cogollos y un picador. En total, el cannabis decomisado pesaba 494 gramos. Según la pericial aportada a la causa, la droga incautada estaba valorada en 3.989 euros.
En la sentencia, además de los dos años de prisión, se incluye una multa de 3.000 euros con responsabilidad subsidiaria de un mes de prisión en caso de impago. Además deberá afrontar las costas procesales derivadas de este asunto penal.
