La celebración del Entroido mostró su peor faceta en Verín, donde los vándalos destrozaron varios portales y contadores del Casco Viejo durante la noche del pasado sábado. Los vecinos de la calle Traviesa amanecieron ayer con cristales rotos, cerrojos forzados, timbres arrancados, puertas arañadas y tuberías aplastadas.
Los inquilinos afectados se plantean denunciar los hechos ante la Guardia Civil, ya que los daños suponen, en algunos casos, la colocación de una puerta nueva.
En la ciudad
La noche del sábado dejó varias denuncias por alcoholemias y ruido en el Casco Viejo de la ciudad. La Policía Local registró al menos tres resultados positivos de personas que conducían bajo los efectos del alcohol. Uno de los conductores, de 65 años, triplicaba el máximo permitido al volante; y otro, de 20 años, lo duplicaba.
Los agentes también denunciaron a un dj que a las tres de la mañana se encontraba en el exterior de un local nocturno en la calle Pena Corneira. Los propios vecinos llamaron a la Policía Local para obligar al cese de la actividad ilegal, ya que el hombre no contaba con licencia para tocar música en la calle.
En la Plaza Mayor, los agentes denunciaron a un hombre que lanzó un vaso de cristal al suelo de forma intencionada.
