CRISIS DE LOS REFUGIADOS

Un alcalde holandés ayudó ilegalmente a familia siria a evitar su deportación

El alcalde dijo que estaba al corriente de que algunos voluntarios estaban ayudando a esconder a esta familia pero que él "no hizo nada para pararlos" porque "estaba totalmente de acuerdo" con su comportamiento

El alcalde del municipio holandés de Weert (sudeste del país), Jos Heijmans, admitió hoy que ayudó a una familia siria que buscaba asilo a evitar su deportación, primero mediante vías legales pero más tarde por encima de la ley.

Heijmans admitió en una reunión con el resto de concejales del municipio que actuó para impedir que la familia (una madre y cuatro hijos) se separara, ya que solo el hijo mayor tenía permiso para permanecer en Holanda, informó hoy el diario 1Limburg.

En una entrevista a la cadena pública holandesa NOS, el alcalde dijo hoy que estaba al corriente de que algunos voluntarios estaban ayudando a esconder a esta familia pero que él "no hizo nada para pararlos" porque "estaba totalmente de acuerdo" con su comportamiento.

"En este caso, dejé que hablara mi corazón y no la ley", manifestó el edil.

Tras dos intentos fallidos de mantener a la familia en Holanda legalmente -primero mediante los tribunales y luego escribiendo una carta el secretario de Estado de Justicia de Holanda, Klaas Dijkhoff-, el alcalde habría ayudado a dar asilo a la familia siria de forma ilegal, según publicó 1Limburg.

La Sociedad Holandesa de Alcaldes (NGB, por sus siglas en neerlandés) ha sido la que ha acusado a Heijmans de haber actuado por encima de la ley en su intento de mantener a la familia en Holanda.

La familia se encuentra todavía en el país pero no ha trascendido la localización exacta, explicó 1Limburg.

El alcalde, del partido centro-liberal D66, declaró que separar a la familia "hubiera tenido graves consecuencias" debido a que el hermano mayor ejercía el papel de padre, recogió Dutch News, y adelantó que ha empezado nuevos procedimientos legales para que se queden en el país.

Por otra parte, la falta de presos en Holanda, unida a la alta demanda de solicitantes de asilo han provocado que la cárcel de Bijlmerbajes, al sudeste de Amsterdam, vaya a convertirse en un centro para refugiados, confirmó hoy el consistorio de la ciudad.

El centro penitenciario acogerá a unos 1.000 solicitantes de asilo durante un periodo de hasta 18 meses desde este verano, informó Dutch News.

Para adaptar la cárcel a un centro de acogida, se eliminarán las vallas y parte del muro que bordea al complejo, según este medio.

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