El Gobierno de Chile informó ayer que hay 10 detenidos por su presunta implicación en los devastadores incendios que están destruyendo miles de hectáreas en el centro y el sur del país y cuyo número de víctimas mortales aumentó a 24.
En las últimas horas de ayer, un hombre que estaba ingresado en la localidad de Angol, en la región de La Araucanía, falleció debido a las graves heridas, lo que aumentó a 24 el balance de víctimas mortales consecuencia de los fuegos.
Además, más de 800 personas se quedaron sin hogar debido a los incendios forestales que desde hace tres días azotan cuatro regiones del centro del país. Decenas de vecinos pasaron la noche a la intemperie en la localidad de Dichato, próxima a la ciudad costera de Concepción, a unos 500 kilómetros al sur de Santiago.
Otros, evacuados de forma preventiva el sábado, se refugiaban en los centros habilitados por las autoridades, donde voluntarios y responsables del municipio se afanaban en el reparto de ayuda humanitaria.
Desde que estallaran, los incendios apenas se combatieron desde el aire, según las autoridades debido a las condiciones de clima y según lo expertos debido a que son compañías privadas las que tienen estos recursos y sus tarifas son excesivas.
En las próximas horas llegaran a la zona de los incendios un avión de la unidad militar de emergencias española (UME) y un avión de gran capacidad hídrica contratado por el Gobierno.