El futuro político del presidente georgiano, Mijail Saakashvili, se decidirá en en Washington, donde la nueva administración del presidente estadounidense, Barack Obama, evalúa la herencia que le dejaron los republicanos. Según informaciones del rotativo 'Kommersant' recogidas por RIA Novosti, se están analizando muy seriamente las consecuencias del apoyo a Saakashvili, que podrían provocar una nueva confrontación con Rusia.
No se puede esperar que la política estadounidense dé un giro de 180 grados, ya que Washington no cuenta con esa tradición. Pero es muy posible que la administración Obama haga ciertos cambios al respecto, que podrían afectar directamente a Georgia. Precisamente, estas correcciones serán objeto de análisis más importante que pronósticos relativos a los nuevos enfoques en Tbilisi.
La rotación de primeros ministros en la política de Georgia augura la caída de Saakashvili, según la opinión de sus opositores y del Kremlin. En ese sentido, otra renuncia de un primer ministro georgiano que apenas estuvo tres meses en el cargo ha provocado discusiones sobre las perspectivas políticas del régimen en Tbilisi.
Según el rotativo, la figura de primer ministro en este tipo de sistema político 'no es clave ni importante', ya que 'reiteradas veces hemos sido testigos de que los primeros ministros georgianos no han podido crear alguna estructura de oposición influyente'.
La discrepancia entre ambas figuras políticas no es nada estratégica en lo que respecta a temas claves. Aparte de sentirse ofendidos personalmente por el presidente, no tienen programas alternativos interesantes ni nuevas ideas. En ese sentido, los apellidos y biografías de los ministros 'juegan un papel absolutamente secundario' en la sociedad georgiana, reza el diario.
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La rotación de primeros ministros en la política de Georgia augura la caída de Saakashvili, según la opinión de sus opositores y del Kremlin. En ese sentido, otra renuncia de un primer ministro georgiano que apenas estuvo tres meses en el cargo ha provocado discusiones sobre las perspectivas políticas del régimen en Tbilisi.
Según el rotativo, la figura de primer ministro en este tipo de sistema político 'no es clave ni importante', ya que 'reiteradas veces hemos sido testigos de que los primeros ministros georgianos no han podido crear alguna estructura de oposición influyente'.
La discrepancia entre ambas figuras políticas no es nada estratégica en lo que respecta a temas claves. Aparte de sentirse ofendidos personalmente por el presidente, no tienen programas alternativos interesantes ni nuevas ideas. En ese sentido, los apellidos y biografías de los ministros 'juegan un papel absolutamente secundario' en la sociedad georgiana, reza el diario.
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