El mapa político de Argentina surgido de las primarias, con pérdida de votos del kirchnerismo, complica las posibilidades de Cristina Fernández de aspirar a un tercer mandato presidencial, según dijeron ayer varios analistas. Según los resultados dados a conocer ayer, el gobernante Frente para la Victoria (FPV) tendría el 26,3% de los precandidatos a la Cámara de Diputados y un 27,4% en el caso del Senado, cifras que distan mucho del 54% de los sufragios que obtuvo Fernández en las presidenciales de 2011.
La mandataria sólo puede presentarse a una segunda reelección mediante una reforma constitucional que precisa de la aprobación por parte de mayorías especiales en las dos cámaras del Congreso. Si el veredicto de las urnas en las legislativas de octubre coincide con el de las primarias del domingo, ello se traduciría en que el kirchnerismo contaría con el respaldo de sólo 38 de los 48 senadores necesarios para cambiar la Carta Magna.
Ese hipotético resultado le 'alejaría de manera casi definitiva la posibilidad de impulsar una reforma constitucional que consagre una eventual re-reelección presidencial', según escribió la politóloga María Matilde Ollier en el diario 'La Nación'. 'El sueño de la re-reelección duerme en una lápida', sentenció por su parte el analista Patricio Giusto, de la consultora Polilat.
El principal sinsabor para el Gobierno fue el triunfo en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país, de Sergio Massa, exjefe de Gabinete de Fernández, primer candidato a diputado del opositor Frente Renovador. El oficialismo también sufrió el golpe de la derrota en distritos menores, pero con peso simbólico, como Santa Cruz, tierra natal del fallecido expresidente Néstor Kirchner.
Ese hipotético resultado le 'alejaría de manera casi definitiva la posibilidad de impulsar una reforma constitucional que consagre una eventual re-reelección presidencial', según escribió la politóloga María Matilde Ollier en el diario 'La Nación'. 'El sueño de la re-reelección duerme en una lápida', sentenció por su parte el analista Patricio Giusto, de la consultora Polilat.
El principal sinsabor para el Gobierno fue el triunfo en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país, de Sergio Massa, exjefe de Gabinete de Fernández, primer candidato a diputado del opositor Frente Renovador. El oficialismo también sufrió el golpe de la derrota en distritos menores, pero con peso simbólico, como Santa Cruz, tierra natal del fallecido expresidente Néstor Kirchner.
