Un vídeo muestra que el hombre muerto en los disturbios del G-20 se dirigía a su casa cuando fue atacado por un policía

La familia del hombre que falleció durante las protestas contra el G-20 en Londres afirmó el martes que es hora de que se haga justicia después de conocerse que la víctima, Ian Tomlinson, fue atacada por la espalda por un grupo de policías antidisturbios poco antes de morir.
La viuda y el hijo de la víctima, de 47 años, consideran que Tomlinson fue un cabeza de turco. Desde que se produjo el altercado hace una semana, la familia optó por el silencio para no interrumpir la investigación abierta por la Policía, no obstante, y tras ver el vídeo que muestra claramente cómo es agredido por un agente, han reivindicado justicia.

Momentos después de que los agentes agredieran a Tomlinson en pleno corazón financiero de la capital británica, éste sufrió un infarto al corazón y murió. La víctima no era un activista más sino que se dirigía de camino a casa cuando fue asaltado por los antidusturbios.

El mismo día del ataque, la Policía dijo que encontraron al hombre desvanecido en una calle del distrito financiero de Londres y, según informaron, el fallecido dejó de respirar sobre las 20:30 horas. Aunque desconocían con claridad las causas de su muerte todo apuntaba a que el fallecimiento se produjo por causas naturales.

RESPUESTAS

Paul, uno de los hijos de la víctima, dijo en declaraciones al diario 'The Guardian' que según sus informaciones, su padre, que trabajaba en un kiosko cercano a donde se estaban produciendo las protestas, cerró su negocio sobre las 19:00 (hora local). 'A través de las imágenes he podido observar cómo se le prohibió la entrada a las barricadas que inició la Policía. Creo que lo que hemos visto responde a muchas dudas', declaró.

Tras ver el vídeo con su madre Julia, el hijo del fallecido declaró que 'ahora, visualizando las imágenes, puedo decir que los agentes establecieron contacto físico con mi padre. Si eso es la causa de su muerte o no, lo desconozco. Estoy seguro de que lo averiguaremos. La justicia hará justicia', dijo, y se mostró esperanzado de que 'las evidencias se van a suceder cada día que pase y sé que vamos a llegar hasta el final'. Por su parte, la mujer, de 52 años, se mostró muy apenada y reconoció que estaba demasiado 'perdida' para encontrar las palabras.

La familia pide que la Comisión Independiente de Quejas de la Policía (IPCC, en sus siglas en inglés), encargada de investigar lo sucedido, entreviste al agente que le empujó y le hizo caer al suelo. 'Queremos respuestas. ¿Por qué?. Ian iba andando, con las manos en los bolsillos y no se enfrentó a ellos. No hay necesidad de que le empujen de esa forma. Las imágenes muestran con total claridad de que ha habido agresión. Hasta ahora no podíamos decir nada pero en estos momentos ya podemos asegurar que si, (los agentes) lo han hecho'.


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