El ático construido de forma irregular en un céntrico edificio con fachada a la calle Rosalía de Castro y a la Alameda será derribado en el próximo mes de marzo, tan pronto cesen las lluvias, según confirmó el alcalde de Carballiño, Francisco Fumega, y el mismo propietario del inmueble, Ramón García. La reciente denuncia de un particular contra el regidor municipal por supuesta prevaricación precipitó la decisión de derribo, pendiente desde hace aproximadamente 12 años. Fumega ha tenido que prestar declaración en calidad de investigado en estos días en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Carballiño y dentro de las diligencias previas abiertas a raíz de que no se ejecutó la orden municipal de derribo del ático, tras la paralización de las obras en el edificio después de que el grupo del BNG alertara sobre su ilegalidad. Ahora está a la espera de que el Juzgado archive el caso o siga adelante con el proceso.
Ramón García afirma que ha pedido una prórroga para proceder al derribo, "porque a cousa non é fácil". El propietario asume que "cometín un error, pero foi un error porque estábase redactando un plan urbanístico novo que contemplaba as catro plantas máis o ático para igualar as alturas dos edificios". Sin embargo, el nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) no se llegó a aprobar ante el rechazo generalizado por parte de constructores y población y, en consecuencia, la situación del edificio no pudo legalizarse. "Díronme licencia para a auga e non entendo porque non me mandaron parar a obra porque un ático non se fai da noite para a mañá", indica el propietario. Asegura que está enfadado porque "siempre din traballo e invertín no Carballiño, ademais de ceder moitos metros de terreno para facer o paseo do Arenteiro e a carretera da fábrica do papel, e agora así mo pagan. Eu incluso estaba disposto a dar máis zona verde se me arranxaran o problema".
El ático solamente tiene fachada hacia la Alameda y es una vivienda de 80 metros cuadrados y Ramón García asegura que "o derribo vai ser complicado", añadiendo que "estaba a espera de que aínda se solucionase, pero un particular, non sei por qué motivo, denunciou ao alcalde, así que agora hai que derribar".
Fumega declaraba que "ten que derribar porque nunca se lle diu licencia e é unha obra que está paralizada desde o 2009". De hecho, el Concello sancionó en tres ocasiones al propietario por no proceder al derribo, con multas que superaban los mil euros.
